Pues, mira, te doy la razón. Lo que pasa es que, aun con sus peros, yo veo a los superhéroes como muy marcados por la ci-fi, como una suerte de desacralización realista de los mitos clásicos. Al menos, la mayor parte de ellos hacen el esfuerzo de darle un barniz (generalmente poco más que eso) racionalista a su existencia. Luego, claro, hay mucha variedad.
El caso del terror es curioso. Durante siglos, la tradición era que el terror / horror viniera de un elemento sobrenatural, se considerara fantástico (como el vampiro decimonónico) o real por temas de religión o creencias en general (el diablo), pero el lado racional era casi antagónico, algo con lo que se juega en Dracula sin desarrollarse realmente. Así, cuando veo una obra que hace un esfuerzo consciente dentro del género de terror por darle un lado racionalista tengo tendencia a verla más cercana a la ci-fi. En efecto, en "Alien" podríamos cambiar la nave por un barco y al monstruo por un dragón, pero creo que el efecto no sería el mismo: el lado genético, depredador natural, con un ciclo biológico espeluznante pero plausible y demás le aporta un extra que, si no, no tendría.
Patafalo y Maddmax:
Entonces las pelis de Blade son ciencia ficción contemporánea en su contexto, ya que de alguna forma explican científicamente el vampirismo como una mera enfermedad transmitida por la mordida del "infectado" vampiro, sin más.
La saga maricona de Twilight es fantasía contemporánea en su contexto, ya que aparecen vampiros maricones sin explicación alguna de su condición (de vampiros, no de maricones pues a nadie le importan los putos maricones).
Lo he "pillado"?
Yo en esos 2 casos no consideraria cifi a ninguna, y creo que ellos tampoco.
¿Por qué? No recuerdo muy allá "Blade", pero creo recordar que le dan bastante cancha al tema del trasfondo con lo de las aberraciones genéticas, el suero y demás. Por poner una película del mismo estilo, "Los inmortales" sí que me parece fantasía pura y dura. Ahí no intentan explicar nada ni tiene relevancia si lo hacen o no. De hecho, por lo visto en la segunda sí que explican cosas y se hunden en la miseria.
Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.