Independencia
-Me parece que ya has bebido demasiado.
La negra se lo repetía a sí misma cada cuatro de julio. Afuera los fuegos de artificio celebraban como cada año la tan vanagloriada hipocresía humana. Nunca bebía, pero ese día se sentía capaz de beberse el mismísmo Mississippi.
ENAMORAMIENTO
Mis ojos, cautivados, se posaron en sus curvas. Llovía, algo normal en otoño. Ella, empapada, chorreaba sensualidad. Limpié las gotas de deseo que inundaban mi frente y la besé. Alcancé el paroxismo al montarla de manera salvaje.
Señor Juez, yo no robé esa moto. Ella me robó a mí.
La palabra es mí
Chipichuski Fernández Pi (Tú puedes llamarme Chipi)