Repaso a las novedades Marvel agosto-octubre II

Llora de alegría, fan irredento

Miedo Encarnado: El día después 3-4

Panini se ha ventilado en cuatro números los doce originales de esta interesante miniserie que ha gozado de más aire para respirar que aquella de la que surgió, Miedo Encarnado. Gracias a ello, Cullen Bunn ha podido desarrollar una interesante trama que no otorgaba un momento de tregua (por ella aparecía la plana mayor del Universo Marvel) y que deja a sus dos protagonistas, Valkiria y la nueva Cráneo Rojo, en un punto que esperemos sepan desarrollar como merecen.

SHIELD 9

Eso que se ve ahí, en el horizonte, es el final de esta tan insólita como fantástica historia creada por Jonathan Hickman. Se trata quizás de la menos Marvel de todas sus colecciones Marvel, pero lleva trazas de marcar el futuro de la línea editorial, máxime cuando el propio Hickman ha pasado a convertirse en el máximo responsable de los títulos de Los Vengadores. Miguel Ángel ha tomado partido por fin en la lucha entre Leonardo y Newton, pero este no va a darse por vencido tan fácilmente.

Spidermen 1-2

Bendis se frota las manos ante este título hecho para el fan y que sabe que va a ser un éxito asegurado (juntar al Peter Parker original con Miles Morales lo sería aquí y en la China Popular). No obstante, hay que reconocer que no se duerme en los laureles y ofrece un cómic que se lee en un suspiro, sí, pero que toca todos los palos que ofrece este encuentro y lo hace bien, muy bien. Mención aparte para una Sara Pichelli mayúscula. Que se quede años dibujando al Hombre Araña, por favor.

VvX: Vengadores vs. Patrulla-X 1-2

Seguimos con la fiebre fan que de repente ha tomado Marvel. Estamos ante un evento en el que las dos grandes familias del Universo Marvel (dejamos fuera a los Cuatro Fantásticos, que bastante tienen con lo que tienen) se lían a tortas por ver qué se hace con esa Fuerza Fénix que se dirige a nuestro mundo y con Hope Summers, su futurible huésped. En un hecho insólito, Bendis, Aaron, Brubaker, Hickman y Fraction firman el argumento del evento, mientras van turnándose como guionistas. En estos primeros números tenemos a Bendis y Aaron (que gana al primero por esa brillante desfachatez que suele usar últimamente). En la parte gráfica tenemos a John Romita Jr, tan contundente como acostumbra, pero pronto le seguirán Olivier Coipel y Adam Kubert. En definitiva, un divertidísimo y apoteósico evento, protagonizado y realizado por lo mejorcito de la casa.

VvX: Vs 1

Y ahora la droga dura. A razón de dos por número, en esta serie encontraremos gran parte de los enfrentamientos que vemos en las esquinas de las páginas del título arriba mencionado. Un “Pim, pam, pum, catacroc”, firmado, de nuevo, por artistas de relumbrón (Aaron y Kubert por un lado, el matrimonio Immonnen por otro) que caen rendidos ante el noble arte del intercambio de bofetadas sin ton ni son. Iron Man contra Magneto y Namor contra la Cosa son los primeros combates. Déjate tu libro de Kierkegaard en la entrada, cerebrín.

Ultimate Marvel 4-6

Hickman continúa ampliando el conflicto que se vive en Ultimates, lanzando a los Eternos de Xorn y Zorn contra Reed Richards. Un movimiento similar que el que ha utilizado durante su largo etapa en los Cuatro Fantásticos, pero parece tener claro que no va a permanecer tanto tiempo. La impresión, pues, es que Hickman ha llegado este título para abrir la ventana, que entre aire y que este aire sea fresco y sano. Falta hacía.

En Ultimate Spiderman, Bendis vuelve a empezar. Si en los comienzos del Ultimate Peter Parker se le criticó mucho por no vestirle de Spiderman desde el principio, con Miles Morales está también desarrollando la trama con mucha calma. No le culpamos: está construyendo -bien, además- un personaje nuevo (Miles) que tiene que sustituir a uno de los personajes de ficción más famosos del mundo. Todo correcto, sólo hay que tener paciencia.

Por último, en Ultimate X-Men, Nick Spencer abre el campo de su colección y da muestras de que el foco no va estar tan cerrado como parecía en un primer momento. Sin embargo, sigue sin dar con la tecla correcta y todo resulta poco interesante. Habrá que ver si remonta el vuelo en los seis números que quedan hasta la llegada de Brian Wood.