Página en blanco
Quería escribir en su diario todos los días. Lo llevaba siempre encima, para no olvidar nada. A la escuela, al trabajo, a la oficina de desempleo, al médico, al asilo. Un niño en el parque, el último día, comenzó a garabatear sobre las páginas desteñidas.
Concentración feroz
Un tornado arrancó el tejado de su casa, y una vaca acabó patas arriba desplomada en el parquet. Pero él no se dejó distraer, despejó la mesa de ramas y siguió escribiendo.