Hombre es que credibilidad tiene poca si lo ha organizado el señor que se sabe que ha conspirado contra partidos catalanes durante años usando ilegalmente a la policía.
También se ha descubierto que el recuento de votos se adjudicó a Indra, empresa metida en el caso Púnica, y para rematar de manera ilegal sin concurso. Ole sus cojones.
El recuento lo hace la mesa.
Perdona, quería decir el escrutinio.
Yo no creo en esas historias. Que el sistema será chapucero a más no poder y que de la chapuza algunos desgraciados pescarán un voto más de aquí o de allí, pero el resultado de las elecciones es un 99% lo que España ha votado.