Algún día
Mamá dice que cuando papá se canse de navegar otros mares, regresará. Se lo dice a mi tía Marta, mientras toman café.
- ¿Mamá, cuántos días faltan para que vuelva papá?
- ¡Ni me lo menciones!
Lloro sin que lo note. Se enfadaría todavía más.
Custodia
El pequeño Miguel descubrió que la distancia que separaba su casa del abrazo de papá era mayor que la que recorría de regreso a ella. Y es que el juez que trazó los caminos no sabía mucho de medidas de longitud.
Criadero
El pequeño Mauro se pone calzas en los zapatos para impresionar a sus futuros papis cuando vengan a buscar a un niño. Siempre se llevan a los más grandes. Lo que Mauro no sabe es que, fuera, el mundo pasa hambre, y que aquello no es un orfanato.
Oh, lástima. Me había salido un micro moníiiisimo con "invierno".
Lo siento. Guárdalo para más adelante. El travestido había llegado tarde y hubo que borrar.
Élite
En aquel orfanato sólo acogían a los niños con mayor potencial. Eliminar a los padres solía ser necesario.
En lo más crudo del peor invierno
Geppeto, con los ojos astillados en lágrimas, tomó el hacha.
En principio estaba escrito para "invierno", pero lo retoqué para que casara también con "necesidad". Geppeto empuña el hacha por necesidad. Creí que se veía claro, pero si su señoría no lo ve así y prefiere descartarlo, me parece perfecto. No problemo! 
En principio estaba escrito para "invierno", pero lo retoqué para que casara también con "necesidad". Geppeto empuña el hacha por necesidad. Creí que se veía claro, pero si su señoría no lo ve así y prefiere descartarlo, me parece perfecto. No problemo!
Aclarado. Ahí se queda.
Efectos del desamor
El amante, despechado, lanzó su hacha contra la luna llena, que por ello se convirtió en menguante
AVISO
Voy a cerrar este chiringuito por unas horas. Otro juez, o yo misma, lo abrirá de nuevo a toque de diana, no antes de las 08:00. Descansen y recuperen fuerzas.
Hasta entonces, solo se podrá colgar un microrrelato, con la última palabra: menguante.
La Gran Saga de Microcuento sobre Gatos Negros (II)
Fue en luna menguante que el pervertido cura del orfanato desapareció para siempre. Los huérfanos se veían más felices mientras los ahora gordos gatos relamían sus bigotes.
Buenos días, Sortjeros Locos.
Se reabre la competición. Vamos allá de nuevo.
La palabra es bigotes
O TODO, O NADA
Ya de novios, descubrieron que ambos alcanzaban el éxtasis sexual practicando el sadomasoquismo más extremo.
Pero tras años de feliz matrimonio, él ya no soportaba lo susceptible que se había vuelto su mujer en la cama:
"¡¡¡Ay Carlos, aféitate ese bigote, no veas cómo te pincha!!!"
Aprendiz
Tres meses de estudio del curso “Vudú a distancia” y una inquina desbordada hacia su vecina del quinto, le llevó a comprar una muñeca y a clavarle agujas para deshacerse de ella. Hoy, para su consternación, asiste junto a la susodicha al sepelio de la vecina del cuarto.
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Palabra: días