Esto es alucinante. Está nevando de nuevo. Las anteriores ni lo había dicho por no resultar cansino, pero es que no para de nevar.
Ahora entiendo lo de las novelas de fantasía épica con la nieve, demonios. Yo pensando que se flipaban con el tema y tal y no, hay gente que vive así. Y tienen palas muy grandes en casa y contenedores con sal por la calle.
Pues nada, oye, apechugaremos con ello.
Aquí tenemos un sol satanado que flipas.
Gonzuelo, levitando a dos centímetros del suelo.