Se ve que el viernes por la noche entraron en casa del vecino de al lado. Me da la impresión de que lo tenían muy fichado, porque en esa casa no para de entrar gente y justo aprovecharon (por lo visto) las dos horas en las que no había nadie. Es una putada, la verdad.
Ahora ando un poco paranoias. No creo que el carricoche naranja les interese gran cosa y tampoco es que tengamos mucas cosas de valor (salvo mi novela de Brutal Ball inédita, que un día me catapultará a la fama ), pero da mal rollo pensar que puedan entrar y traumatizarme a los críos (bastante tienen con los escorpiones). Además, con el follón que hay siempre en esta casa, como que podrían prepararse unos cafés en mitad del saqueo e igual no me doy cuenta...
Qué mal rollo, irte a una aldea dejada de la mano de dios y que haya historias así. Deberías comprarte un perro guardián.
Es probable emitió su esperma de una forma muy descuidada.