Y, digo yo, ¿de verdad existe gente que se dedica a esto?
Más de lo que pensamos. Yo he llegado a la conclusión de que se trata de algún tipo de desorden mental, piensan que son tan buenos que no tienen por qué escribir sus propios textos. Es absurdo pero funcionan así, si se lo recriminaras no entendería qué es lo que ha hecho mal.
Es como esa gente que va robando fotos de otra persona por las redes sociales y se monta su propia personalidad pública. Están mal de la olla.
Saludos,
Entro
Pues sí, alucinante, sin más. La poca vergüenza que hay que tener para hacerlo y mantener el tipo sin miedo a que te descubran... En fin...
Lo que no quiero es dejarme llevar por la paranoia, porque si casualmente, haciendo esto de poner en el buscador una frase incompleta sale semejante resultado, a saber lo que habrá por ahí. A saber a cuántos de nosotros han copiado de forma tan descarada y miserable. Ná, sería una pérdida de tiempo seguir mirando, porque anda que no tengo microrrelatos aquí en Ociozero colgados de todas las microjustas en las que he participado que podría ir metiendo en el buscador... ¿Te imaginas meter un micro tuyo y que el resultado sea que alguien ganó un premio con...? Que no, que no me dejo llevar por la paranoia.
Por cierto, Entropía, "Sabemos lo que te gusta", muy bueno, muy paranoico.
No hablo nada más de los relatos vuestros del Visiones, que se supone que hay que comprarlos.
Bote, eso te pasa por ser tan bueno . No, en serio, el tuyo es un relato cojonudo, no me extraña que haya impresionado a más de uno. Entiendo tu enfado pero no le daría importancia, míralo como una especie de (retorcido) homenaje.
Gracias por leer con buenos ojos mi relato
Así me lo tomaré, pero no dejo de alucinar con los comportamientos de algunos. Fíjate que he cogido un pedazo de frase de otro de los micros del plagiador este, y lo mismo, copiada directamente de otro relato de por ahí con algún cambio mínimo. Es que el muy capullo no se limita a copiar una idea, es que lo copipastea y le cambia cuatro palabras...
Tus relatos se leen del mismo modo que se mira un cuadro. Ambientas la extrañeza, propones visiones, nunca mejor dicho, que se disfrutan sin necesidad de explicación del porqué.
Mírame a los ojos...