Bueno, pues acabo de ponerle el punto y final a La Sortija con una breve fábula canina. Morgana, si eres tan amable, desplaza tu curvilíneo cuerpo hasta aquí y ponnos algo bebible a mi fiel Hipodérmico y a mí, que estamos secos como la mojama. A ser preferible, que contenga alcohol y no tenga grumos.
Yo también termino aquí mi andadura en La Sortija. Muy divertido el certamen, vive Dios. Ahora toca relajarse y disfrutar de uno de esos colacaos que tan graciosamente me sirve mi tabernera favorita.
Pero, ¿quién ha dejado entrar aquí a esta niña que habla tan raro? Que deje de corretear entre las mesas, que me está poniendo nervioso. ¿Y por qué se mete con mi barba con lo bonita y cuidada que está siempre? A ver, que alguien llame a sus padres y se la lleven.
Bueno, pues acabo de ponerle el punto y final a La Sortija con una breve fábula canina. Morgana, si eres tan amable, desplaza tu curvilíneo cuerpo hasta aquí y ponnos algo bebible a mi fiel Hipodérmico y a mí, que estamos secos como la mojama. A ser preferible, que contenga alcohol y no tenga grumos.