Ayer fuimos a dejar en el tren a los dos mayores (con servicio de acompañamiento, que todavía no han terminado su entrenamiento interurbano) y volviendo para el coche me encuentro un cartel en la vitrina de una farmacia informando de los protocolos en caso de fuga radiactiva. Se ve que como el pueblo de marras está a menos de 10 km de una central les suministran yodo para casos de emergencia.
Nunca había visto uno, pero se ve que en Francia hay tantas nucleares que siempre te pilla una bastante cerca. Esta, en concreto, la tengo a una hora de mi aldea perdida
Es que entre lo del bono de retirada y la alerta nuclear parece sacado de la Guerra Fría.
Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.