Ya echaba yo de menos al hombre. Estadística Fly-mierdera, ha debido de pasar en esta casa como el 30% del tiempo desde que nos mudamos. Ya me ha dicho que hoy ataca el techo pero que mañana no viene. A ver si al menos no me corta algún cable de internet y me deja incomunicado de nuevo...
La última vez dijo que volvería el martes, se olvidó la escalera de mano y tardó como doce días en ser martes. Es otro ritmo, sin duda.
Por cierto, se está ocupando de la cocina, elemento clave de la casa. Por suerte hay una pizzería en Lussas, así que de hambre no moriremos.
Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.