Tres monumentos a mi agonía

Relato admitido a concurso.

Correcta y fiel versión en prosa del poema de Byron. 3 estrellas

No había leído esto y ya te he contestado en la cripta jajaja. Mujer, no me mates. Hacemos una cosa, te digo que es malísimo pero que a pesar de lo mal escrito que está te doy tres estrellas. ¿Más positivo no?

  Perfecto relato que ensalza el poema de Byron de forma más que correcta. La esquisitez y elegancia con que está escrito se bate en dramático duelo con la sensación que deja de estar prosatizando el poema del escritor romántico. Una prosa, sin embargo, sublime y muy bienllevada por la autora. No he sido capaz de encontrar fallo alguno en la redacción del escrito, salvo esta nimiedad que no deja de ser algo muy discutible:

"Ahora, recoge su brillo dorado en un par de trenzas..."

   Veo esa coma sobrante, aunque el aire con que se dota al escrito, quizás la fuerza por darle coherencia al conjunto del relato. He sentido envidia sana de tal composición y de lo mucho que sabe la autora sobre el mundo de la escritura.

   Ahora bien, el que se haya el transcrito el poema casi literal (observese el casi), le resta originalidad e innovación. Sin embargo, por el esquisito lenguaje utilizado, por la sensación de tristeza y desesperación que transmite tan cómodamente su autora,  porque es un relato perfectamente trazado y porque es el primero que leo en el que estas tres pautas se unen armoniosamente, no puedo dejar de darle mi más alto galardón, con la salvedad de comentar al resto de participantes, comentaristas y foreros de esta santa casa, que el dar las cinco estrellas, en mi caso no implica la perfección.

   Me veo en la obligación de explicar que yo, siempre subjetivamente, pienso que la perfección como tal no existe y si en este concurso, se hubieran valorado los relatos del 1 al 10, jamás hubierais visto un diez en ninguno de ellos por mi parte, al igual que nunca podreis ver un cero mío como nota a un relato, pues soy de los que piensan que el mero hecho de mostrarnos un trozo de cada uno, que a fin de cuentas eso es lo que hacemos cuando colgamos una historia o relato, es lo suficientemente loable y de agradecer como para tomarlo encuenta.

   Pero dado que nos vemos en la tesitura de catalogarlos con el sistema de estrellas, me veo en la obligación de darle la más alta nota. Mi enhorabuena a la autora. Por primera vez en este certamen digo algo que espero poder pronunciar más a menudo:

Querida Jane, me quito el cráneo ante usted.

★★★★★

Este relato me ha encantado. Magníficamente escrito, cuenta una historia de castigo o maldición, aparentemente sencilla, pero que consigue estremecer con sus palabras. Excelente ejercicio de funambulismo literario este homenaje a Lord Byron. Solo tengo un pero y, por desgracia, desconozco cómo solucionarlo. Se trata del segundo “monumento a mi agonía”. El primero es muy potente, consigue que el lector se incorpore de la silla al relacionar el título con lo que se supone que va a ocurrir. El segundo aparece demasiado seguido. No sé si alargar un poco la parte que hay en medio, para distraer al lector, solucionaría ese (quizás solo para mí) problema. En cualquier caso es un problema menor, nimio en comparación con la belleza del relato.

Personalmente opino que es un relato cinco estrellas, pero el hecho de basarse en una historia ya contada le resta cierta originalidad, así que mi puntuación es de:

★★★★☆

Una idea curiosa. No demasiado original, como han dicho. Lo que hace especial a este relato también lo constriñe: debe seguir un camino marcado, unos pasos, sin mucho espacio para inventar, porque con ello se perdería la gracia del asunto. No hay sorpresa, no hay misterio; se lo juega todo a una carta.

Peeeeeeero la ejecución es estupenda. Un estilo precioso y trabajado que te clava esa agonía y te deja hecho polvo al final. Se lleva cuatro estrellazas por mi parte.

★★★★☆

Ains...

Siento debilidad por este tipo de prosa, que Jane maneja tan bien. Y cómo es capaz de dibujar tan perfectamente al personaje (que ni siquiera describe por fuera) que te lo imaginas como alguien de verdad.

Yo le achaco solo algo muy leve en contra. Y no es falta de innovación, porque este vampiro me parece premeditadamente clásico, de otro modo no se lograría crear de un modo tan efectivo esa cualidad tangible de la atmósfera. Es solo que me hubiera gustado un punto más oscuro o más siniestro en el relato. El vampiro produce tristeza y hasta empatía, nada de horror. Así que por falta de escalofríos...  4 estrellas

De lectura ágil, lo cual siempre es agradable. Me gusta cómo está insertado el poema (desconocía que era de Byron ). Estilo muy decimonónico que me cautiva (es una de mis debilidades). El título insinua y es atractivo, y el relato cumple esas expectativas, pero... no acabo de comprender porqué ha de perseguir solo a los suyos para saciar esa sed de sangre. Lo he releído varias veces y no llegó a entender el porqué (no me queda tan claro como al resto, así que supongo que será que mis neuronas no dan para más). He visto ternura en el personaje, así que por ese lado también me gusta, pero esperaba más vísceras... Algo más aterrador, más sombrío e inquietante y sobre todo más novedoso. 

También he percibido alguna leve cacofonía (para mí que son paranoias mías, porque la detecto en casi cada texto que leo hoy... ). Y luego está lo de "redivivo" que por más que sea correcto, creo que no lo considero del todo apropiado en ese contexto (manías que tiene una... ).

En fin,no me explayo más. Mi puntuación: 3 estrellas. Porque me gusta, pero no me entusiasma.

P.D.: Jane, entre tú y yo, creo que puedes hacerlo mejor.

Relato poético y decimonónico, muy disfrutable y sin estidencias. No es el relato que uno espera encontrar como ganador de un certamen porque no es original ni efectista, pero sí es lo que uno busca cuando quiere paladear literatura antigua, de atmósfera y melancólica.

En mi humilde opinión, es un relato perfecto para un taller. Como ejercicio literario me parece muy interesante. Genera atmósfera y transmite sensaciones. Sin embargo, como jurado, he de cambiar el chip y esperar que se me cuente una historia distinta, original, que no pueda prever. Pero bueno, eso no significa que el relato no tenga posibilidades, ni mucho menos.

Cómo os gusta vacilarme... 

Esto es trampa o algo, ¿no? Quiero decir, pobre Polidori, mira que meterle a Byron de por medio... Hum, ¿qué hago contigo?

Esto de los remakes tiene su aquel. Sin duda, tienen una dificultad añadida a escribir un relato sin más, pero, sobre todo, tienen muchos riesgos añadidos. ¿Qué aporta este relato a la obra de Lord Byron? ¿La actualiza? ¿Le da nuevas dimensiones? Francamente, me hubiera gustado que fueras un paso más allá, que en el aspecto formal trajera algunas claves extra, o en el marco de la historia.

Al mismo tiempo, si dejo de lado mis manías personales, la ejecución es buena, la narración fluye bien, el homenaje está conseguido y encaja en la convocatoria. Ya veré qué hago.

No sé, no sé. Tengo la impresión de que algunos autores conocéis mis manías y las usáis sin tapujos. Esas menciones a Villa Diodati, esos personajes literarios de mis estanterías, esos reflejos foscos en la iluminación... Me hacéis sentir un perro viejo bien conocido en sus manías.

Bueno, tú no te preocupes mucho que Léolo es un gran juez y compensará mis desmanes.

Y, además, gracias a ti se me ha ocurrido incluir una traducción de El vampiro, de Polidori, en la antología, que haré para la ocasión. Vamos, que tu huella estará sí o sí en el libro.

Romántico, de vieja escuela, pero ventilado; en un viaje de tres paradas se nos da un sujeto que sufre por una condición. Cumple y no innova (de pronto también esto es esperable tratándose de un relato basado en el Giaour. Reiterar falta de originalidad, en cuanto a contenido, ya no aporta), sin embargo es una pieza más bien valorada por la fuerza poética. Es una bella transmutación del verso de Byron a la prosa.

★★★☆☆