Terrores nocturnos
Una horrible pesadilla hizo que llamara a su madre entre sollozos.
Ella apareció en la habitación aplicándole, con su voz, un bálsamo de consuelo. Le explicó que los fantasmas son producto de la imaginación de los niños y, lanzando un beso al aire, se evaporó tras la pared.
Vuelvo a subirlo que ha llegado al borde de la página... otra vez