La polémica de los submarinos españoles

A raíz de la noticia inicial, que me sorprendió, me he informado y la cosa tiene mucha miga.

El submarino español es un modelo Clase S-80, COPIA del modelo de submarino francés Clase Scorpène, diseñado por DCNS (Direction des Constructions Navales) en la década de 1990. Como dato, tal empresa es fundada en 1631 por el famoso Cardenal Richelieu, siendo desde hace casi 400 años la principal constructora naviera militar francesa. Pues dicha empresa en los 90 fabrica un modelo de submarino de bajo coste (el Scorpène, diésel, no nuclear) para países modestos y contrata para las armadas de Chile, Malasia, India y Brasil. La empresa naviera estatal española Navantia (entonces llamada IZAR) colaboraba con DCNS al aportar mano de obra más barata que en Francia.

Pasados los 2000 DCNS y Navantia finalizan relaciones porque terminan las construcciones, España pero, quiere sus propios Clase Scorpène (en concreto 4 ampliables a 6) pero no quiere pagar lo que cuestan (800 millones casa uno), así que por orden del Gobierno, Navantia se pone a fabricar sus propios Clase Scorpène, por un precio reducido (500 millones cada uno, 2000 millones por 4 unidades), por lo que DCNS demanda y el enfrentamiento legal le obliga a Navantia a variar el diseño del submarino para evitar plagio y espionaje industrial por mano del Estado español (un gran escándalo MUY tapado) así que Navantia (en toda su sabiduría de empresa española sin experiencia en diseño de submarinos militares, pues solo ayudaba en la construcción) modifica el diseño de sus Scorpène y renombra la clase a Clase Isaac Peral o Clase S-80.

Qué ocurre? Que tras hacer las modificaciones en el diseño, el submarino funciona mal y pierde mucha flotabilidad, lo que hay que volver a rediseñar (un gran sobrecoste que duplica el presupuesto de 2000 millones a 4000) y sale el S-80 Plus, de 10 metros más largo para que pueda flotar correctamente. Y aquí tenemos pues a unos submarinos diésel de tecnología obsoleta de los 90 que han costado 4000 millones por culpa del sobrecoste en diseños y rediseños chapuceros (cuando si los hubiera comprado a DCNS les habrían salido 3200 millones y funcionarían bien) para España, un país sin enemigos y sin operaciones navales en el extranjero pero en crisis económica y serias dificultades como la deuda o las pensiones.

Ésta es la clásica locura por orgullo español de tener algo demasiado caro (e inútil) aunque sea dando un riñón para no ser menos que los demás y poder decir que España tiene submarinos. Penoso y lamentable para todos pues nuestro dinero nos ha costado.

PD: Sólo 5 países en el mundo tienen submarinos nucleares (EEUU, Rusia, China, Inglaterra y Francia). Tener hoy en día submarinos diésel es tecnología obsoleta porque un submarino nuclear soviético de los 70 duplica la velocidad de cualquier diésel de hoy, a parte de aportar muchísima más energía que alimenta dispositivos y sistemas más potentes y capaces de detección, sigilo, comunicación, análisis etc. Es invertir en una tecnología inferior pero costosa, incapaz de enfrentarse a sus rivales superiores que son los que tienen realmente el dominio militar del mar.