Es una vergüenza que en un país presuntamente democrático se prohiba hablar en el idioma oficial. El fascismo en Cataluña es aún más salvaje que el de Galicia, las tiendas tienen que rotular en catalán; si solo lo hacen en castellano, les cae una multa. Todas las informaciones en la calle en catalán, así que si vienes de fuera y no entiendes, te jodes, aunque seas tan español como los habitantes de esa comunidad. La enseñanza es toda en catalán, se discrimina al que viene de fuera y se le reprime en su propio país.
Dice el que conoce al dedillo la situación cultural en Cataluña.
Permíteme que me ría.
Lo que es vergonzoso es mentir de este modo. ¿De qué prohibición hablas?
Además, ¿no eras tú el que estaba preocupado por la cultura autóctona, eso de comerse el bocadillo de jamón en la calle y tal? ¿O es que la cultura catalana no es española para ti? Porque o es española, o no lo es.
Mi hermano vive en Barcelona desde hace años, curra ahí y no habla catalán. Y no le ha supuesto ningún problema. Yo tampoco he tenido ninguno ninguna de las veces que he ido por ahí.
Es lamentable que el acceso a una riqueza cultural, como es el hablar varios idiomas, se tenga que ver estigmatizado.
Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.