El símbolo del sol
En aquel momento mire al cielo y directamente sobre mi frente había caído una moneda dorada.
Con cuidado la tome con mi mano derecha y empecé a examinarla, era una moneda con un dibujo del sol en ella, voltee a todas partes para saber de dónde había caído. En todas partes no había nada excepto por un puente a como doscientos metros de mi. Me encontraba realmente aburrido así que no me importo ir hasta allá, al llegar como esperaba no encontré a nadie, solo un par de bancos de concreto y un par de arboles a su alrededor limitados por el concreto, era como una pequeña plaza en el puente donde uno podía contemplar a la gente que estaba más abajo. Entonces me encontré sentado en una de las bancas grises de concreto esperando observar a la gente pasar caminando sin ninguna preocupación por aquel terreno urbano donde ahora podía ver calles, semáforos, casas a lo lejos. Casi no había nadie lo cual me aburrió soberanamente, tal vez debería hacerlo ya pensé, recargue mis codos en las rodillas y a su vez mi cara en mi mano derecha. Simplemente parecía que la gente no estaba de humor y ni siquiera se mostraba por las calles, “¿se sentirán igual que yo?”, me pregunte. Empecé a jugar con la moneda en mis manos. Entonces escuche el sonido de un teléfono al lado mío, por alguna razón ni siquiera me había dado cuenta que estaba allí. Estaba aburrido, pero no pensaba para nada levantar la bocina de un teléfono público. Sonó incontables veces, pero repentinamente, se detuvo. Me alegre, el sonido empezaba a exasperarme después de todo ese tiempo. Me levante finalmente de la banca.
Entonces lo escuche el sonido del timbre del celular que llevaba conmigo. Me preguntaba quien seria, “tal vez alguien que me salve de este aburrimiento”, pensé, el numero de la pantalla estaba oculto, pero conteste, mantuve el celular en mi oído por un tiempo pero nadie contestaba del otro lado.
– Hola – Dije por segunda vez después de haber contestado.
– Tira…la…moneda – Dijo espaciadamente una voz grave de ultratumba.
– ¿Quién es? – Pregunte.
–Tira…la…moneda – Dijo nuevamente.
No podía decir que fuera una voz sospechosa, pero como podía saber de la moneda que llevaba, mire a mí alrededor, no vi a nadie.
– ¿Cómo sabes de la moneda? – Le pregunte.
–Tírala.
En ese momento la llamada se corto. Me quede viendo la moneda. Que se suponía que era aquella moneda. Realmente era extraña, me había caído de la nada y ahora alguien sabia que la tenia, alguien que la quería seguramente, me empecé a preguntar cómo es que sabia mi numero, me encontraba inquieto, en que me había metido, tal vez era algo que alguien había robado, tal vez era algo valioso, por un momento pensé en quedármela, pero si lo hacía podía ser peligroso, me aferre al borde del puente con las manos mientras decidía. Negaba y afirmaba cuantas opciones pasaban por mi cabeza y finalmente alargue mi brazo dirigí mi vista y la lance. Rápidamente empecé a correr a la salida del puente, “ellos ya no deben tener interés en mi”, me decía tratando de calmarme.
Solo fue hasta que se me acabo el aliento que lo vi, lejos del puente había un sin número de personas, todas reunidas y amontonadas, discutiendo entre ellas, me acerque cuidadoso hacia estas, empezaron a observarme con disimulo y algunos otros tantos con notable curiosidad.
–Después de todo no fui el ultimo –Se dirigió a mí un pequeño hombre algo regordete sonriéndome.
– ¿Qué es lo que pasa?, ¿Por qué están todas aquí? – Le pregunte.
–Tú sabes por qué.
–No lo sé, ¿Cómo habría de saberlo? – Le dije un tanto como si estuviera enojado por algo.
El hombre se me quedo viendo sin perder la sonrisa, al parecer de saber algo que yo ignoraba.
–Oh, viene alguien más – Dijo un hombre entonces señalando a lo lejos.
Me acerque junto con otros, se trataba de una chica que parecía, igual que yo, confundida al ver a todas esas personas reunidas.
– ¿Qué pasa? – Pregunto.
– ¿Por qué viniste? – Le pregunte por impulso.
–No lo sé – Me contesto –, solo… me callo encima esta moneda.
Mostro la moneda, mi moneda, porque la tenia ella, era una de ellos, me estaba observando.
– ¡Atrás, atrás les digo! – Dije sacando mi arma del bolsillo.
– ¿Qué haces? – Grito el pequeño hombre que antes me hablo.
–Soy un hombre muy peligroso señores, me encuentro aburrido y no temo usar mi pistola – Decía mientras histérico les apuntaba.
–Cálmate muchacho, por favor, todos aquí somas tus amigos.
–Amigos míos no, no los conozco, aléjense – Les decía –, me iré corriendo de este manicomio.
Corrí entonces, corrí tan rápido como pude, con todas mis fuerzas, hasta volver a ver el puente. Me perseguían, “tengo que perderlos”, me decía. Pero de repente hubo una explosión, tierra y escombros se esparcieron por el aire mientras yo trataba de protegerme con mis brazos, la onda expansiva me mando a rodar un poco y de pronto mi traje negro se volvió gris y se había roto por todas partes.
Estuve un tiempo arrodillado mientras chillaba y gemía con el mismo ritmo cual fuera hipo.
– ¿Q…Que paso… Q…Que paso?
Vi enfrente de mí a tan solo unos metros de donde estaba, todas las calles, casas y el puente, habían sido completamente destruidos.
–Esto no fue lo que pedí, hubiera preferido seguir aburrido, no pensaba realmente en suicidarme, solo quería algo diferente…saben… - Dije volteando a ver a toda la gente que estaban a tan solo unos metros de mi y también habían sido golpeados por la bomba.
–No, no lo hiciste tu hijo – Me dijo el mismo hombre.
– ¿Quién entonces?
–No lo sé, pero la voz nos ha salvado, para que cada quien nos salváramos, te aseguro que del otro lado no hay nadie, ni un alma que sufriera la explosión – Dijo el hombre muy satisfecho y agradecido con una gran sonrisa en su rostro colorado.
–N..No lo creo… - Le dije balbuceando apenas.
– ¿No estás convencido? – Dijo extrañado.
–La bomba, ¿Quién la lanzo?
–Pues…, no lo sé, un país descontento quizá…
Mientras hablaba aquel hombre tras un fragmento de escombro observe un pedazo de metal sin duda de la bomba, en el había un símbolo, el dibujo de un sol, el sol que nos había controlado a todos desde el principio. ¿Nunca tuvimos el control de nada?.
Esta sera mi ultima historia, no es que yo quiera jaja, esta vez es de terror, no muy terrorifica aunque sea malo que lo diga, ya que era terror y suspenso me enfoque un poco mas en el suspenso, aun asi es un poco mas al terror de antaño, como el de el buen Alfred Hitchcock o la Dimension Desconocida, de todas maneras ojala lo disfruten. Saludos.