El jurado dictamina que Yllanes es culpable de "homicidio"
El jurado popular del proceso que juzga la muerte de Nagore Laffage ha dictaminado que José Diego Yllanes "no es culpable" de "asesinato" y sí de "homicidio". Tras conocer el veredicto, la Fiscalía ha solicitado doce años y medio de cárcel y la acusación particular quince. Ambas han anunciado un recurso de apelación.
13/11/2009 10:46:00
IRUÑEA-. El jurado popular encuentra a José Diego Yllanes "culpable" de un delito de "homicidio", con la circunstancia agravante de "abuso de superioridad" y contempla cuatro atenuantes: embriaguez, arrebato, confesión y "reparación del daño", las mismas que había solicitado la defensa del acusado al término del juicio.
Tras permanecer ayer todo el día deliberando en el Palacio de Justicia, los nueve integrantes del jurado popular han dado a conocer su veredicto pasadas las 13.00, en una vista a la que han asistido todas las partes, incluido el propio Yllanes.
El jurado ha contestado a cerca de 40 preguntas planteadas por el presidente del tribunal para determinar la culpabilidad o no de Yllanes en determinados hechos. En su opinión, el 7 de julio de 2008, Nagore Laffage y José Diego Yllanes acudieron a casa de él y comenzaron de mutuo acuerdo un contacto físico "de forma apasionada, en el que el acusado comenzó a desnudar de forma violenta a la joven, ya que "pensó erróneamente" que ella "quería una relación apasionada".
Para el jurado, esa brusquedad fue interpretada "erróneamente" por Nagore Laffage "como un intento de agresión sexual y como reacción le amenazó con destruir su carrera y denunciarle", a lo que Yllanes reaccionó tapando la boca de la chica "para evitar que gritara" y golpeándola "de manera deliberada y repetida".
"Tras golpearla, presionó con su mano el cuello de Nagore produciéndole su asfixia y muerte", y "con el fin de poder hacerla desaparecer más fácilmente, intentó descuartizarla llegando a seccionar su dedo índice", de acuerdo con el relato del jurado.
Luego envolvió el cadáver, limpió el piso, requirió la ayuda de un compañero de trabajo y, ante su negativa y tras rechazar acudir a la Policía, trasladó el cadáver a Sorogain para dejarlo en un paraje de la zona.
El jurado considera probado como circunstancias agravantes que para matar a la joven, Yllanes "se aprovechó de su superioridad física" y de sus conocimientos en técnicas de artes marciales.
Atenuantes
En cuanto a los atenuantes, el jurado valora los 126.853 euros consignados por Yllanes para entregar a los padres de la víctima y el embargo de sus propiedades; el reconocimiento de la autoría del crimen y su petición de perdón "desde el primer momento"; la influencia del alcohol que afectaba de "forma leve" a las facultades del acusado, y su colaboración con la Policía y la autoridad judicial.
También cree probado que el procesado "vio alterada su percepción de la realidad, su conciencia y su voluntad" al ver que Laffage "le amenazó con destruir su carrera y denunciarle".
Por todo ello, por unanimidad, el jurado ha encontrado a José Diego Yllanes "culpable del hecho delictivo de dar muerte a Nagore Laffage al agarrar y apretar fuertemente su cuello hasta causarle la asfixia por estrangulamiento manual", si bien no estima que el estrangulamiento fuera "aprovechando su situación de aturdimiento e indefensión provocada por los golpes previamente recibidos".
También por unanimidad, le considera culpable de cortar el dedo índice de la mano derecha del cuerpo sin vida de la joven.
Recalificación de las peticiones
Tras conocerse el veredicto, se ha celebrado una "vistilla" en la que las partes han expuesto sus peticiones de pena en función del veredicto del jurado.
El fiscal ha solicitado doce años y seis meses de cárcel, cuatro años y medio menos que los reclamados al finalizar el juicio.
La acusación particular, que había solicitado 20 años y cinco meses, ha pedido hoy quince años por "homicidio" y cinco meses por "profanación de cadáver". Tanto la Fiscalía como la acusación particular han anunciado un recurso de apelación por la decisión del jurado.
Por su parte, las acusaciones populares, (ayuntamientos de Iruñea e Irun, Gobierno de Nafarroa y Juntas Generales de Gipuzkoa), que defendieron penas que iban desde los 17 a los 22 años de cárcel, han coincidido en pedir 15 años para Yllanes.
Será el presidente del tribunal el que dicte la sentencia en los próximos días.
Lo triste de estos casos es que uno llega a preguntarse qué es peor en estos días, si los putos jueces corruptos y tragasobornos o los tribunales populares llenos de subnormales.
Xoso vive en un mundo post apocaliptico (...) y recorre en su motocicleta steampunk la desolada tierra acompañado por Pérez Reverte... [1]