El retrato de Dorian Gray

Reseña de la obra maestra de Oscar Wilde

“El retrato de Dorian Gray” no es una novela, sino una obra de arte.

La prosa de Wilde alcanza una sutilidad y una magia increíble en este texto, transportándote y haciéndote entrar en la trama y el alma humana de un modo sorprendente. Sus frases encierran una gran poesía, hasta tal punto que no resultan bellas únicamente en su vertiente estética, sino también en su contenido.

“El retrato de Dorian Gray” es un estudio anímico de la belleza y de uno de sus soportes, el arte. La caducidad de la existencia, la moralidad, la hermosura… todo se entremezcla en unas páginas llenas de sentimiento que diseccionan, con el dolor propio del que lo ha vivido, el escenario enigmático que es la sociedad victoriana londinense.

Los portavoces de la narración a lo largo del texto sirven de contrapuntos para disfrutar del prisma desde todos los puntos de vista. El cínico lord inglés, con su característica flema y humor británicos, capaz de convivir humanamente con la frivolidad del día a día haciéndola devenir un arte se contrapone al artista que se obsesiona con la idea del propio arte y que, a pesar de verse menos atado por los corsés de esta sociedad de apariencias, resulta menos humano, menos próximo, por estar sumergido en su búsqueda de la humanidad.

Entre estos dos pilares, el tercero, el amigo común, el inocente y hermoso Dorian Gray, que servirá de punto de partida de sus propios análisis sobre el ser humano, quien será, finalmente, el alma cándida atrapada por la angustia que genera ser consciente de la fragilidad de nuestro propio ser, de nuestra existencia.

En uno de los prefacios más conmovedores –en el auténtico sentido de la palabra- que jamás haya leído, Oscar Wilde nos prepara para lo que encontraremos en el interior de esta obra. “No existen los libros morales o inmorales, sino libros bien o mal escritos”. En pleno siglo XIX es un pensamiento temerario. Tal vez lo sea todavía en nuestros días.

“Podemos perdonar a la gente que haga cosas útiles siempre y cuando no las admire. La única excusa para hacer cosas inútiles es que alguien las admire intensamente.” Perturbador como pocos autores haya habido, Wilde nos arrasa con un simple prefacio de dos páginas, y nos transmite un mensaje claro: éste no es un libro maniqueo. Es un libro que toca el alma, y va más allá del bien y el mal, porque es arte, y ésta es una de las perturbadoras esencias del arte.

Quizá lo más curioso de este libro sea el ver cumplido, finalmente, el Deus ex machina que hace girar la historia: la eternidad de la belleza. Claro, que aquí ha sobrevivido al paso del tiempo, impoluta, como un libro, no como en la novela que este mismo libro encierra.

Autor

Oscar Wilde nació en 1854 en Dublín (Irlanda) y falleció en el año 1900 en París (Francia). Novelista, poeta, crítico literario y autor teatral de origen irlandés, fue el mayor exponente del esteticismo, cuya principal característica era la defensa del arte por el arte.

Estudió en Oxford, donde destacó en estudios clásicos, y cosechó su primer éxito literario con el poema Ravenna (1878). Convirtió su estilo de vida bohemio de juventud en su propia filosofía, y, a pesar de que se ridiculizase su excentricidad, ganó muchos seguidores con su ingenio. Tras ser condenado en 1895 por sodomía en un escandaloso proceso, fue condenado a dos años de trabajos forzados, tras los cuales se exilió a París bajo el seudónimo de Sebastian Melmoth.

Entre sus obras destacan El príncipe feliz (1888), La casa de las granadas (1892), El crimen de lord Arthur Saville (1891), El retrato de Dorian Gray (1891), El abanico de lady Windermere (1892), Una mujer sin importancia (1893), Un marido ideal (1895) y La importancia de llamarse Ernesto (1895).

Sinopsis

Dorian Gray, un hermoso muchacho de clase aristocrática, se ve enfrentado a la esencia del ser humano tras unas reveladoras conversaciones entre dos buenos amigos y los incidentes que tras ellas llegan

Edición

The picture of Dorian Gray

Oscar Wilde

Peguin Popular Classics

Penguin Books, 1994

Ediciones recientes en castellano

Altaya, rústica 2005

Biblioteca nueva, rústica 2000

Edebé, rústica 2002

Ediciones Escolares, rústica 2001

Edimat, rústica 2003

Espasa Calpe, rústica 2000

Planeta De Agostini, cartoné 2004, 2003, 2002, rústica 2003

RBA, cartoné 2003

SA de Promoción y Ediciones, piel 2001, 2002

SM, rústica 2001

Valdemar, rústica 2005, 2004

Vision Net, pdf 2002

Conclusión

“El retrato de Dorian Gray” es una novela que hará las delicias de cualquier buen lector. No sólo la maestría del autor escribiendo deleitarán a quien la lea, sino también la agudeza de las reflexiones que vienen implícitas en la historia y la misma trama, ingeniosa e inteligente, que nos sirve de hilo conductor.

Una novela llena de sentimiento y de pasajes memorables que nos transportará al Londres del siglo XIX y a los problemas del atormentado espíritu humano, que siguen siendo los mismos. Una novela, asimismo, que nos hará lamentar que Oscar Wilde no escribiera ninguna más, puesto que, sin duda, es una auténtica obra maestra.