Exégesis

Reseña de la obra de Alejo Cuervo publicada por Gigamesh

Por algún colega de Barcelona conocía a Alejo Cuervo, el mito, pero incluso cuando me lo crucé en una Hispacón, en plena efervescencia de Juego de Tronos (saga en la que apenas me estoy iniciando, como improbable y recalcitrante hereje), no podía disociarlo de narizones y juegos de rol épico-decadentes. Sin embargo, ahí había una persona, una que desataba pasiones y murmullos. Una a la que he podido conocer más gracias a este Exégesis. Porque si algo es esta obra, además de una panorámica curiosa de lo nuestro, es un trabajo muy personal.

La primera mitad se dedica a una historia del fantástico en nuestro país. Una, porque está muy marcada por la propia visión del autor. En Colección Fantasy: Presentación, La Enciclopedia Galáctica: Presentación, La Biblioteca Ideal y Gigamesh Libros: A modo de presentación encontramos anécdotas, hechos, libros a recomendar, obras que han marcado, filias y fobias, muchas cosas interesantes contadas con desenfado y de un modo muy entretenido y fragmentario. Y cabría preguntarse si medio libro construido a base de presentaciones rescatadas del baúl de los recuerdos llevan a alguna parte. La respuesta es sí.

En concreto llevan a un Alejo Cuervo muy personal. Uno que primero se arranca con un relato, Ostras con salsa picante, que es una genialidad con tintes inquietantes por la trayectoria de su autor como editor, pero que, más allá de los paralelismos curiosos y divertidos, aborda cuestiones que a mí, como escritor, editor, lector, maquetador y hombre orquesta peregrino me han robado horas de sueño como un buen relato de terror. Prefiero no ahondar en el tema, pero me ha sorprendido sobremanera esta faceta del personaje (sí, me temo que sigue siendo en buena medida un personaje para mí, y no pretendo resultar irreverente).

Más me ha sorprendido el tema de las poesías. En Enredando con las musas, segundo round, Alejo Cuervo se dedica a contar sus experiencias peleando con poemas varios. De nuevo me he visto reflejado en algunas reflexiones, aunque he de confesar que me he saltado la mayor parte de los poemas para no chafarme futuras lecturas. Prefiero disfrutarlos en su contexto. Eso sí, las anécdotas adjuntas han caído todas.

Cuando he llegado al cierre, Reproches al sector editorial, Alejo Cuervo ya se me había ganado, pero al acabar de leer el artículo me dieron ganas de ponerme en pie y aplaudir (a pesar de estar solo en el tren). Todo el que lleve un tiempo relacionado con el sector editorial español (y supongo que mundial), y no importa en qué función (escritor, editor, lector, traductor, corrector, lo que sea) habrá oído mil quejas y visualizado mil problemas, sobre todo si se dedica o tiene debilidad por el triunvirato de ci-fi, fantasía y terror o páramos aledaños. Sin embargo, pocas veces oyes o lees a alguien que ha decidido tomar el toro por los cuernos y hacer algo concreto. No desintegrar el nudo gordiano, pero ya por lo menos aflojarle alguna vuelta. Leer sobre la política en el catálogo editorial de Gigamesh para que no naufraguen los fondos de catálogo (entre otras cosas) a mí me ha dado no ya solo esperanzas, sino ganas de presentar batalla. Así, os traslado su pregunta: ¿Cuál es vuestra postura en esta guerra?

La mía espero que haya ido quedando clara con Saco de huesos, con los Calabazas, con OcioZero, con mi paso por asociaciones... y espero que aún lo sea más. Gente como Alejo Cuervo han ido labrando un terreno; ahora nosotros, aparte de disfrutar lo conseguido, deberíamos poder aportar un algo. Como lectores, como autores, como editores. Como fans. Al menos, eso espero. Entre medias, leerse cosas como este Exégesis no están de más. A mí me enganchó como una novela.