Reanimator
Reseña de esta adaptación al cómic del relato de H.P. Lovecraft realizada por Florent Calvez y publicada por Delcourt en Francia
Esta obra es la adaptación a cómic del relato largo de terror en seis partes escrito por H.P. Lovecraft y publicado en castellano bajo el título "Herbert West: reanimador". En ella se ha conservado la estructura por capítulos, que son igualmente "De la oscuridad", "El demonio de la peste", "Seis disparos a la luz de la luna", "El grito del muerto", "El horror de las sombras" y "Las legiones de la tumba", y, también, muy cuidadosamente la atmósfera. El resultado es una novela gráfica muy sólida, que se lee con mucha fluidez, y que rescata con todo su sabor el género de relatos de terror propios del comienzo del siglo XX.
El argumento es digno del maestro del horror que fue H.P. Lovecraft: un científico apasionado por su trabajo, carente de escrúpulos morales o ataduras espirituales, que investiga la reversibilidad de la muerte. Su formación médica y su fría razón le hacen plantearse el problema como algo meramente mecánico: si la muerte aviene cuando se detienen las funciones del cuerpo, ¿se podría volver a la vida si se estimularan externamente éstas?
La historia, como se ve, bebe directamente de la novela de Shelley "Frankenstein, o el moderno Prometeo", pero deja de lado las implicaciones filosóficas para centrarse en el ambiente macabro y los mecanismos propios del terror, centrando la narración en el "científico loco" y las abominaciones resultantes de sus experimentos.
Como cabe imaginarse, la ambientación propia de cementerios por la noche, vetustas mansiones, siniestros laboratorios, apartados rincones de los Estados Unidos y sugerentes universidades se suceden a lo largo de la obra, magistralmente retratadas por Florent Calvez. Sus lápices no sólo dan cuerpo a los horrores creados por el escritor de Providence con sobrio acierto -acentuando esa pátina de terror relacionado con la realidad-, sino que el coloreado, de un apagado tono sepia, parece transportarnos directamente a principios del siglo pasado.
Esta sobriedad de la obra, que transmite muy bien la sensación de leer en un viejo diario sobre terribles hechos pasados (un recurso muy propio del género), no está reñida en absoluto con la fuerza narrativa, con la creación de una atmósfera a veces rota por un impresionante plano general, especialmente remarcable en algunos capítulos, o con la violencia contenida, llena de movimiento, de algunas viñetas. Todo un ejemplo de fuerza narrativa sin alardes aparentes.
El resultado es una novela gráfica para leer tranquilamente, en un buen sillón o junto a fuego, de noche o en una tarde de tormenta, retomando ese placer por las historias aterradoras o por el bienamado género de los cuentos de fantasmas tan presente en la cultura anglosajona. Sin duda, una magnífica adaptación de la obra del popular escritor que hará las delicias de los amantes de sus escritos.
Autor
Florent Calvez es grafista, diseñador web e ilustrador de cómics, facetas artísticas en las que gusta de abordar distintos géneros, prestando siempre una gran atención al aspecto técnico. Su primera obra, U29, fue seguida rápidamente de la publicación de "La isla de los Lestrygons", que contó con guión de Eric Corbeyran. Forma parte del colectivo de artistas droidatwork, de cuya página web se ocupa.
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Planeta DeAgostini acaba de sacar una edición del cómic en castellano.
Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.