Aqui expongo un muy interesante artículo de Jose Manuel Bringas, redactor de la revista online Revogamers, dedicada al mundo Nintendo.
Fue escrito hace un tiempo, y no sé si alguien lo leyó, pero aunque es cierto que mucho (y demasiado) se ha hablado de Wii, creo que este inteligente texto puede aportar nueva luz a la gran controversia que trajo el sorprendente catálogo de Wii.
Artículo:
Vivimos al que es el cambio más radical en el mundo de los videojuegos desde que a un japonés se le ocurrió juntar a fontaneros con setas: vivimos la expansión al gran público. Esto ya no es cosa de minorías, ni siquiera de minorías millonarias, estoy hablando de introducir los videojuegos en la vida cotidiana de la gente, juegos destinados a personas que nunca antes habían jugado, que nunca se habían interesado por los juegos. Juegos que, muchas veces, ni siquiera pueden ser clasificados como tales, sino como crucigramas interactivos, programas de ejercicios o, simplemente, retos mentales que buscan algo más que el mero entretenimiento por parte del consumidor.
Como analista, veo que los periodistas del sector estamos siendo todos muy poco profesionales con estos tipos de juegos. ¿Porque somos una panda de indocumentados y no tenemos idea de trabajar? No, porque no tenemos ni pajolera idea de cómo abordarlos. ¿Culpa nuestra? No. Sencillamente porque no somos el público al que van dirigidos.
El ejemplo más claro que se me ocurre es el de la industria juguetera. Ellos prueban los juguetes en habitaciones con niños. No se la dan a un adulto para que decida si la “Supercocina de Playmobil” es divertida, son los niños los que, sin saberlo, ayudan a los fabricantes a determinar tanto la viabilidad comercial como el éxito de un producto. ¿Cómo entonces, pregunto yo, podemos pretender que un jugador que considera Metal Gear o Fallout como la cima del entretenimiento coja Wii Music y los ponga al mismo nivel? Porque eso es lo que ha pasado, lo que está pasando y lo que seguirá pasando a no ser que hagamos examen de conciencia y asumamos que no estamos preparados para afrontar este tipo de juegos.
Cada vez que llega a mis manos un juego de este tipo hago el mismo ejercicio. Me imagino a quien va dirigido y trato de ponerme en su pellejo. Es absurdo coger un título como Wii Music y compararlo con Guitar Hero porque son títulos completamente diferentes destinados a públicos completamente opuestos. Sin embargo, la prensa especializada, en su gran mayoría, ha chocado una y otra vez contra ese muro.
Hay que buscar las claves acertadas para estudiar y evaluar estos títulos. No puedo coger Cooking Mama y hablar de sus texturas o quejarme de que no tiene multijugador online. No procede, ya que el público al que va dirigido esas cosas le importan un comino. El resultado en la mayoría de los casos, es un analista confundido que acaba poniendo a parir el juego y una horda de jugones poniéndolo verde, amén de un inexplicable (para ellos) éxito sin precedentes en las listas de ventas.
No digo que los mejores juegos sean los que se vendan más (¡válgame el cielo, eso nunca!) pero sí digo que en muchos casos los análisis no tratan de buscar al comprador objetivo, sino de ejercer de veterano del sector y poner a parir algo que no se comprende o no gusta. En mayor o menor medida, hay que pensar que puede que nuestra crítica influya en la lista de la compra de alguno, y hay que ser justos. Aunque el juego nos tire para atrás, a lo mejor nuestra hermana lo encumbra como lo más divertido que ha jugado nunca.
Fin.
Personalmente me cabe añadir a lo expuesto, que ciertamente Wii ha sido (y es) una consola que ha traido consigo una revolución, y tan grande como no la esperábamos, que muchos no la supimos digerir y tomamos lo fácil de rechazar eso tan extraño y decepcionante.
Ladeo la cabeza, negando, cada vez que leo que los "imagina ser" son juegos casual o juegos basura. No lo son. Son infantiles. Los juegos de nuevo público y tienen un espectro espectacularmente amplio, pero se centran en jóvenes y adultos sobretodo.
Los juegos infantiles, sencillamente son juegos infantiles, ni siquiera pueden englobarse en los ocasionales, o party games o cosas así. Y debería ser digno de elogio que las compañías se vayan especializando en los críos, que hasta ahora vivían de los juegos de películas y pasaban después a un GTA.
El tiempo ha dado la razón, a voces calladas, a las novedades que la revolución de Wii ha traido consigo, pues no es de extrañar que sus competidoras xbox y playstation hayan inspirado muchas de sus posteriores novedades tanto en software como en hardware en cosas semblantes a Wii o a sus juegos.
Concluyendo, ¿que la revolución no convence a los hardcores? naturalmente, es bien sabido que para que un juego hardcore tenga éxito es básico que evolucione poco y que siga muchos patrones de éxito anterior (léase el decálogo de Monopoc http://www.ociozero.com/?q=node/4491).
XBox y Playstation, con su tecnología mas potente, ayudan con la revolución de Nintendo, cogiendo los aspectos que mejor pueden utilizar y hardcorizándolos, pues elementos como los miis de xbox y el sixaxis de ps3 solo fueron la punta del iceberg, y marcaran un antes y un después en los sistemas de personificación de jugadores online y controladores del futuro.
No imagino lo aburrida que habría sido esta generación sin Wii, pocos avances, mas de lo mismo, potencia, gráficos, tecnicismos que no impresionan y una "era HD" que al final no era para tanto.
Es cierto que Nintendo tiene bastante que aprender respecto al online de Microsoft y Sony, pero en unos años se verá que aportó cada compañía y cada consola al mundo de los videojuegos, aspectos implementados en futuras consolas que disfrutarán incluso los más acérrimos detractores de Wii en su momento, y se le dará el reconocimiento que merece.
Saludos.