DEJADEZ EVOLUTIVA
El nuevo alcalde, fiel a su promesa, cerró el zoológico. Pero fue tal su abandono, que los animales acabaron campando a sus anchas, y el libre albedrío biológico favoreció la reproducción entre ellos.
Con el tiempo, el Flamencodrilo, el Drometigre, o la Jiráguila sustituyeron a las especies autóctonas.
Conservación fallida
Muchos consideraban una crueldad confinarlos en aquel hábitat, empujarlos sin remedio a esa existencia artificiosa. Otros, por contra, creían que así los salvaban de la extinción inminente; pero sería cuestión de tiempo, en realidad, que aquellos bípedos lampiños acabasen desintegrando su propio peñasco flotante en mitad del cosmos.