La noticia parece sacada de cyberpunk, pero se ve que hay un puñado de gente investigando vulnerabilidades en los dispositivos médicos de alta tecnología: marcapasos, distribuidores de insulina, desfibriladores y cosas así:
http://rt.com/usa/hacker-pacemaker-barnaby-jack-639/
Me he quedado muy pillado con el tema, la verdad.
A mí lo que me escama no es que traten de vulnerar los dispositivos, que como hackers que son es lo más natural, sino la misteriosa muerte del tipo. No hay que olvidar que hacker no equivale a delincuente: del Black Hat salen enormes adelantos de seguridad y privacidad personal gracias a gente como este hombre. ¿Cómo van a mejorar ahora la seguridad en dispositivos médicos inalámbricos si el hacker ha muerto antes de revelar la vulnerabilidad?
El siguiente en explotar ese fallo podría no tener tan buenas intenciones.
El rebaño del lobo