Hablar de esta película son palabras mayores. Una nueva mirada para el cine y amplía los horizontes de una industria que pedía a gritos savia nueva. Fascinante. La compleja historia de un niño implacable y hombre de honor y cuyo poder es exprimir tal derroche de voz y sonoridad increibles dentro de un cuerpecito tan sumamente sexy. Un prodigio de originalidad, un film tragicómico y trepidante, romántico hasta el paroxismo, que tributa en cada fotograma un goce para los sentidos. Ante todo, un ejercicio narrativo de insuperable nivel: la brillante disección de todos los personajes, el ritmo magistral que alterna largas secuencias familiares con creíbles escenas de musical, la gran evolución del joven personaje y una ambientación perfecta consiguen un film que entrará entre los mejores clásicos de todos los tiempos... para alzarse con el título de obra cumbre del cine moderno.
Para quien la quiera degustar:
http://www.peliculasyonkis.com/pelicula/justin-bieber-never-say-never-2011/
Anormal, me pasé línea y media leyendo con interés.
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