Con Wine, qué remedio.
De momento, la instalación tira p'alante, aunque en cualquier momento puede romper. Y como soy idiota y lo estoy instalando en un disco externo, se van a producir unos cuellos de botella guapos.
Sólo unos pocos comprenderán la verdadera relevancia de este hecho.
Error brutal. Pues nada, a la cama.