La narración de Arthur Gordon Pym

Reseña de la única novela de Edgar Allan Poe

La narración de Arthur Gordon Pym es una novela que suscita mucho interés, tanto porque es el único trabajo largo de su autor como por la mezcla de novela de aventuras y terror que incluye en sus páginas. Dado que no soy un experto en la obra del autor, no entraré en hipótesis sobre el porqué de esta historia, aunque es imposible no hacer mención a la estructura de la misma, que seguramente está ligada a este. Y es que, en cierto modo, más que como una novela se podría ver como un folletín.

La obra fue publicada de un modo episódico y presentada como un diario personal del superviviente de la peripecia náutica, lo que marca mucho el estilo narrativo y los puntos de tensión e inflexión dentro de la misma. Además, nos encontramos con que presenta dos partes muy diferenciadas, incluso en el tratamiento de los personajes. En la primera, hay un naufragio más o menos normal, en el que Edgar Allan Poe incide en la mala cabeza de quien les lleva al mismo, mientras que en la segunda la trama va zozobrando hasta llevarnos nada menos que al Polo Sur y a tierras ignotas por aquella época. Si la primera parte se podría adscribir al género de aventuras marineras de corte realista, aun con la tendencia del autor a la truculencia, la segunda entra ya de plano en el terreno del fantástico, de la exploración de territorios vírgenes en los que lo improbable se puede hacer pasar, hasta cierto punto, por verosímil. Y digo hasta cierto punto porque, personalmente, creo que el autor buscaba más el sentido de la maravilla pura que no aventurar qué habría realmente más allá, en aquellas tierras no holladas por el hombre blanco.

La narración de Arthur Gordon Pym se desarrolla de un modo fragmentario e inconexo por momentos, lo que refuerza la idea del diario pero fragiliza la coherencia de la trama y la verosimilitud de la misma. El final, inconcluso para unos, abierto para otros, acentúa esta sensación de estar ante una novela algo deshilachada. Al mismo tiempo, engancha. Poe consigue mantener la tensión en todo momento y conseguir que el lector quiera ir algo más allá. Que naveguemos sin rumbo, en esta tesitura, no tiene tanta importancia.

Personalmente, encuentro más interesante y conseguida la primera parte, en la que sufrimos con los personajes las dificultades de encontrarse en alta mar, sobre todo cuando tanto los elementos como humanos se convierten en un territorio hostil. Y es que La narración de Arthur Gordon Pym tiene pasajes realmente espeluznantes y claustrofóbicos que hacen que como obra de terror funcione a la perfección. No obstante, es fácil entender la fascinación que supuso la segunda parte, que a su vez ha ganado interés con el tiempo por la cantidad de obras que ha inspirado o que le han servido de continuación no oficial.

En conjunto, sin ser uno de los trabajos más redondos de Edgar Allan Poe, reviste mucho interés y encierra escenas e imágenes de gran potencia. Si el escollo del caos argumental no hunde las expectativas del lector, es una obra que queda en la memoria y se puede disfrutar mucho.