Crónica del II Encuentro Liter Imaginarius

Los pasados días 7, 8 y 9 de noviembre se celebraron en Huesca estas jornadas de literatura y cine de terror organizadas por la Asociación Juvenil Oscafriki en torno a la figura de H.P. Lovecraft

Por segundo año consecutivo, la Asociación Juvenil Oscafriki ha organizado el encuentro Liter Imaginarius, unas jornadas de literatura y cine de terror que cuentan con el patrocinio del Área de Cultura del Ayuntamiento de Huesca y de la CAI, así como con la colaboración de las Bibliotecas Municipales de Huesca y de Nocte, la Asociación Española de Escritores de Terror.

Estas jornadas han servido de punto de encuentro para los aficionados y profesionales del género de terror y se han articulado en torno a una serie de conferencias impartidas por miembros de Nocte y que versaban sobre la vida y la obra de H.P. Lovecraft, el maestro del terror de Providence.

Voy a realizar una breve crónica de las mismas que no captará, seguramente, el interesante ambiente de diálogo que se estableció en el fabuloso marco del salón de actos del Centro Cívico Santiago Escartín.

Viernes, 7 de noviembre

Las jornadas se inauguraron con un breve acto que dio paso de inmediato a la conferencia La evolución del género de terror. Antecedentes y perspectivas impartida por David Jasso, presidente de Nocte, escritor y jefe de producción de una videoproductora. Fue una conferencia muy amena en la que se dieron algunas claves para entender el género. Más que las motivaciones para crear o leer terror, me gustaría resaltar los que apuntó como mecanismos del miedo (el dolor, la muerte y lo desconocido) y los tres tipos de terror que se pueden trabajar: el de gato (o sobresalto causado cuando menos te lo esperas), el de tripas (basado en la propia fuerza visual o narrativa de algunos elementos, el cual, obviamente, resulta muy visceral) y el de puerta (que se apoya en la expectación creada en el lector jugando con lo desconocido, lo que aguarda).

Tomó el relevo David Mateo con Revistas de cuentos: un género en vías de extinción. Presentación de Historias Asombrosas, un bien documentado análisis de la situación histórica y actual del género en el marco de las revistas literarias. Quizás demasiado técnico para los profanos, fue sin duda interesante ponerse al día, aunque sea para constatar la triste situación de estas pioneras publicaciones que, muchas veces, no encuentran el respaldo del público. Un gran detalle por su parte, Historias Asombrosas repartió ejemplares entre los asistentes. Esperemos que más de uno se enganche con las formidables narraciones de estos dos primeros números y cojan con ganas el tercero.

A continuación, José Miguel Vilar desarrolló Huellas de Lovecraft en Robert E. Howard, una interesante conferencia en la que vimos los paralelismos entre el maestro del terror y el padre del género de espada y brujería, quienes durante años intercambiaron una importante correspondencia y quienes sin duda se motivaron mutuamente a seguir con su pasión literaria. Dos vidas lúgubres que captaron la atención del público con la amena exposición del escritor y periodista valenciano.

Como cierre, El horror surgido del espacio, una charla en la que Sergio Mars, con cierta sorna al principio, y un profundo acierto durante toda la conferencia, trató de convencernos de que H.P. Lovecraft fue un escritor de ciencia ficción. A mí no sólo me convenció totalmente, sino que además me adhiero a su opinión de que fue una pena que sus sucesores optaran por desarrollar la parte más pseudomística de su obra en vez de dar una oportunidad a los caminos que fue perfilando hacia el final de su carrera. Fue una lástima que el tiempo se quedara escaso para uno de los temas más insospechados y mejor desarrollados de las conferencias.

Por suerte, durante el posterior encuentro en un bar cercano y la cena que le siguió, pudimos seguir regalándonos con esta primera tanda de conferenciantes venidos de Valencia. Un privilegio haberlos tenido por Huesca.

Sábado, 8 de noviembre

Por la mañana se celebró un taller literario infantil impartido por David Mateo, poniendo la nota más clara de apertura de las jornadas, que no estaban destinadas, como a veces se cree, a los lectores especializados, sino a todo aquel interesado por el terror.

A primera hora de la tarde llegó el relevo con Emilio Bueso, que nos presentó a ritmo sostenido Ave nocturna y cazador de sueños, una conferencia en la que se repasaba la trayectoria literaria del autor entrelazándola con su propia experiencia vital. Fue una charla muy interesante para reflexionar sobre la influencia extraliteraria sobre la obra de Lovecraft -impresionantes los pasajes del escritor buscando empleo tras la crisis del 29- y que sentaron muchas bases de lo que se comentó en la posterior mesa redonda.

A continuación, y en un tono tan pausado como bien asentado, Ismael Martínez Biurrún nos trajo Lovecraft y el horror materialista, un breve estudio sobre algunos elementos claves en la obra del autor y en su estilo que puso de relieve algunos aspectos diferenciales que han hecho del escritor un personaje único dentro del género y la literatura universal. De nuevo, algunas de sus reflexiones se trasladaron a la mesa redonda.

Óscar Bribián tomó el relevo con Herbert West, el reanimador de H.P. Lovecraft, una disección del relato que escribió el autor de Providence por encargo y que inspiraría la película homónima que se proyectó al día siguiente. El escritor aragonés aprovechó para hacer un resumen de la vida del autor y poner en contexto lo que supuso la redacción de este texto, una obra que no ha envejecido muy bien a causa de su formato por entregas pero que, al mismo tiempo, ha sido fuente de inspiración de obras modernas más interesantes, como el cómic Reanimator.

Cerrando la jornada, empezó la mesa redonda bajo el lema Lovecraft, la fuerza de su simbolismo, en la que participaron José María Tamparillas -quien hizo de presentador-, Óscar Bibrián, Emilio Bueso, Miguel Puente, Ismael Martínez Biurrún y David Jasso con una buena respuesta por parte del público. De la misma se extrajeron dos conclusiones: que Lovecraft no fue un buen autor en el sentido técnico y que su capacidad de transmitir terror, no obstante, y seguramente por vivir aterrado, sigue manteniéndose intacta.

Domingo, 9 de noviembre

Miguel Puente llevó el peso de esta jornada de cierre con su conferencia El terror no tiene forma: Ocho consejos prácticos para escribir una historia de terror, basada en el interesante artículo homónimo. Fue una de las ponencias que más público atrajo, y éste no salió decepcionado, pues sin duda resultó muy didáctica y fue conducida con mucho acierto.

Haciendo tiempo para el acto de entrega del III Premio Liter, cuya convocatoria se ha recuperado con mucha ilusión este año, Roberto Malo y David Jasso nos deleitaron con sus dotes narrativas con sendas actuaciones que arrancaron más de una carcajada y muchos aplausos. La primera sirvió de acicate para leer las antologías del autor, mientras que la segunda ilustró claramente el terror de puerta... aunque el final resultara inesperado.

Tras estas actuaciones, el comité organizador leyó la relación de obras finalistas del III Premio Liter, y lo falló a favor de "El cónclave", de Óscar Bribián Luna. El autor nos leyó un fragmento del mismo dejándonos con ganas de más. Cabe comentar que esta nueva convocatoria del certamen ha sido un éxito, y esperamos que tenga continuidad.

Como despedida, se proyectó Reanimator, la película basada en el relato de H.P. Lovecraft.

Conclusiones

El buen ambiente de las jornadas y la calidad de las conferencias dejaron con ganas de repetir el año que viene. Cabe felicitar a la organización de la Asociación Oscafriki por el buen puerto al que han llegado sus esfuerzos. El año que viene repetiremos, disfrutando, si todo va como se rumorea, de unas jornadas en torno a Richard Matheson, autor de obras como "Soy Leyenda" o "El hombre menguante". Una cita muy recomendable para los amantes del género de terror, en cualquiera de sus vertientes.

Más información en http://literi-08.blogspot.com/