Tú eres el mal

Reseña de la novela de Roberto Costantini publicada por Grijalbo

Tú eres el mal es una novela policíaca de desarrollo pausado. La trama se presenta en dos momentos puntuales, en 1982 y en el 2006, pero implica, de algún modo, la vida completa del protagonista. Adentrarse en sus páginas es una carrera de fondo: Costantini no escatima en dar detalles cotidianos, lo que da brillo al retrato de la Roma de la época y permite desarrollar la psicología de los personajes al tiempo que anega los datos relevantes sobre la trama criminal, que, por otro lado, no se nos ocultan.

La inmersión en Tú eres en mal implica convertirse en la sombra de Michele Balistreri, un comisario afincado en Roma que vive incómodo en el presente en el que se ha visto encallado tras una juventud a calzas revueltas con la extrema derecha italiana. Se trata de un personaje muy bien dibujado cuyo único “defecto” es el amor que le profesa su creador: este se recrea a la hora de mostrarnos su visión del momento y también a la de contarnos su vida, hasta el punto de darle prácticamente todo el protagonismo.

Esta decisión es la que obliga al ritmo pausado de todo el libro, ya que no estamos simplemente resolviendo una investigación policial, sino siendo testigos de un momento crucial en la vida de un hombre. El retrato psicológico tiene aquí tanto peso como la trama criminal y da pie a uno de los elementos, a mi parecer, más interesantes de la novela: la reflexión sobre las relaciones de poder y las humanas en general, cuyo reflejo más extremo y terrible serían las propias víctimas del asesino.

Tampoco es que este ritmo lastre la lectura. La prosa es ágil y la narración entretenida. Así, aun conscientes de que los interrogantes no van a resolverse hasta la última página, tampoco tenemos en ningún momento la sensación de habernos quedado varados. La traducción, por otro lado, es solvente y no interfiere en la lectura a pesar de algún detalle peculiar (como haber conservado liceo para referirse al instituto o a los estudios de bachillerato).

Sí que es cierto que en algún momento se percibe que se trata de una novela primeriza. Algunas escenas están resueltas con manifiesta precipitación, lo que contrasta con el ritmo general. No obstante, no es la tónica general. Bien al contrario, estamos ante una novela bien pulida y que discurre sin complicaciones.

En conjunto, Tú eres en mal es una lectura recomendable para quienes busquen perderse por las sugerentes calles de Roma de la mano de un duro policía no exento del particular encanto de los italianos.