Breathing Room
Sobre la película de John Suits y Gabriel Cowan
Investigaciones psicológicas se realizan a diario en centros como en el que han tenido la mala suerte de aparecer una docena de personas. ¿Quiénes son? ¿Qué pretenden averiguar de ellos?
SINOPSIS
Una atractiva joven aparece de repente en una extraña habitación junto a 12 personas más divididas en dos equipos. Forma parte de un juego en el que deben encontrar las piezas de un puzle en una misteriosa caja que será la llave de la libertad. A todos ellos se les ha asignado un collar eléctrico que, no siempre con un motivo claro, los irá eliminando mediante mortales descargas uno a uno cada vez que las luces de la habitación empiezan a apagarse. Cuando se encienden y aparece el cadáver de uno de los participantes se proporciona al mismo tiempo una pista más que los jugadores deben descifrar para encontrar las respuestas a sus preguntas. ¿Quién será la próxima víctima en ser eliminada del macabro juego? ¿Cuál es el misterio que se esconde detrás de toda esta complicada trama? Además, no todos los personajes son en realidad lo que aparentan…
LOS DIRECTORES
John Suits nació el 11 de mayo de 1983 en Huntington Beach, California, Estados Unidos. En la industria del cine, y en tan sólo seis años, ha trabajado como ayudante de dirección, guionista, director, editor, productor, director de fotografía, actor. Como director cuenta en su haber con los siguientes títulos: Sand castle (cortometraje, 2006), The grande finale (cortometraje, 2006), Mr. Fisher (cortometraje, 2007), On the road again: Two-Lane blacktop revisited (cortometraje, 2007), Breathing room (2008), Family of four (2009) y 2nd take (2011).
Gabriel Cowan nació el 4 diciembre 1973, Los Angeles, California, Estados Unidos. Al igual que John Suits no le ha hecho ascos a ningún aspecto del trabajo de cine y ha trabajado de productor, guionista, ayudante de dirección, editor, director, director de fotografía, compositor de banda sonora, cámara y departamento eléctrico, departamento de sonido y actor. Ha dirigido los siguientes títulos: Pharmaceutical (cortometraje, 2005), Changing direction (cortometraje, 2005), Remove (cortometraje, 2006), On the road again: Two-Lane blacktop revisited (cortometraje, 2007), Breathing Room (2008), Ms. Lonelyheart (cortometraje, 2008) Flower in the gun barrel (2008), Growth (2010), Korea online (cortometraje, 2010) y actualmente se encuentra filmando 3 Nights in the Desert.
COMENTARIOS
Breathing room fue rodada usando únicamente dos cámaras y con un presupuesto aproximado de unos 25.000 dólares y ha llegado a ser distribuida internacionalmente gracias a Anchor Bay Entertainment. Esta distribuidora es conocida por la trilogía de Posesión infernal, del director Sam Raimi, en VHS y DVD, la tetralogía de George A. Romero de los Muertos vivientes y la gran mayoría de las películas de Dario Argento, el famoso director de cine italiano. Así mismo, ha distribuido para televisión The walking dead, Masters of horror y en el pasado otras como 21 Jump Street (que dio a conocer a Johnny Deep, Hércules, Roseanne, El gran héroe americano y Xena, la princesa guerrera, entre otras. El éxito de la película la ha conducido a participar en un gran número de certámenes como el Pi fan de Korea, el Horror hound weekend y el Brussels international Fantastic film festival.
A partir de la sinopsis y del cartel promocional, el espectador puede comenzar a hacerse ilusiones y creer que va a asistir a una película llena de intriga y misterio que le mantendrá en la butaca hasta el último minuto. Algo de ello tiene, a decir verdad, pero no por las razones que debiera. La película no proporciona ninguna innovación al género, no presenta algo que no hayamos visto al menos media docena de veces. En su favor hay que decir que no tiene la claustrofobia como elemento principal de tensión, dado que la habitación en la que los personajes se mueven es amplia. Existe un cierto elemento de tensión por averiguar cómo van a salir los personajes de allí a pesar de que sabemos algo desde el primer momento: alguien que secuestra gente y la somete a ese trato tan brutal, no va a dejar que ninguno de los participantes tenga una oportunidad real de escapar con vida. ¿O sí?
Nos encontramos ante un ejemplo más del que podría ya calificarse como cine de Trampas en más de un sentido. Un grupo de desconocidos que aparecen en una sala sin ninguna relación aparente entre ellos, sin información de lo que está sucediendo y escondiendo parte de lo que son y han sido en su pasado. Podemos comenzar recordando otras películas de temática similar como la famosa Cube (Vincenzo Natali, 1997), Saw (James Wan, 2004), La habitación de Fermat (Luis Piedrahita/Rodrigo Sopeña, 2007), Bane (James Eaves), Exam (Stuart Hazeldine, 2009), Nueve muertos (Nine dead, Chris Shadley, 2009). Todas ellas similares, en cierta medida y mayor sangre, al relato The squirrel cage, de Thomas Michael Disch publicado en 1967 acerca de un hombre que queda aprisionado en un gran cubo blanco. La diferencia radica en que se supone que, en casi todas ellas, todos los encerrados tienen algo en común.
A partir de este punto, se incluyen detalles explícitos de la trama y el argumento.
Pero con Breathing room tenemos un grave problema. Si hacemos memoria, recordaremos que en la película Cube no se nos daba ninguna explicación acerca de las razones que habían movido al diseño y construcción de una cárcel de las características que vemos en la pantalla. No sabemos quién, cómo, cuándo o porqué, pero tampoco nos importa. Desde el primer momento se nos ha negado el acceso a dicha información y no podemos considerarnos estafados cuando al final de la película seguimos en la más completa ignorancia al respecto. En Breathing room, sin embargo, se nos escamotea la información. Al final de la película parece que vamos a tener un atisbo de revelación final que explique y justifique todo lo sucedido, pero no es el caso. Casi todo aquello que en su momento aparenta ser relevante desaparece después de la trama como si nunca hubiera existido.
Con la paranoia y desconfianza como guía argumental y las frases más manidas de los últimos años, del estilo: ¿quién eres realmente tú?, ¿qué hacemos aquí?, no te fíes de él o la única cierta de todas, vamos a morir todos, la película va perdiendo interés por momentos en lugar de ganarlo. Bueno, ciertamente el espectador está interesado en saber cómo van a resolver la situación creada, pero no perderá el sueño si se queda sin saberlo. Hay que tener en cuenta, y ahí se encuentra la clave del asunto, que uno de los participantes no es tal, sino un observador metido de lleno en el juego para dirigirlo en cierta medida desde dentro y movilizar las emociones de los participantes. De hecho, tras ser la única superviviente del actual juego, es metida en otra sala para dar comienzo a otro diferente. Si alguien quiere saber quién es el infiltrado, (¡oh, sorpresa!) sólo tiene que mirar la portada o el poster promocional.
A pesar de la advertencia alguien puede pensar que acabo de hacer un spoiler en toda regla pero me temo que los espectadores más curtidos están más que acostumbrados a estos giros del guion de última hora. Más aún: los esperamos como el que espera el The End (según un amigo mío, una marca de Té que es de obligado anuncio en toda película). Realmente resulta un poco frustrante aguantar hora y media para descubrir… poca cosa. Sí, se trata de un experimento acerca del comportamiento humano bajo presión, pero nadie nos cuenta para qué lo realizan, o quién, o su posible aplicación práctica. Nada. Como en la conocida Cube, pero a mil años luz para atrás de la misma. Y es que no vale sólo con copiar una idea con más o menos fortuna; hay que dotarla de una naturaleza y una fuerza propia. En fin, que nadie pueda decir que no lo comuniqué a su debido tiempo.
Puntuación: 5
FICHA TÉCNICA
Título: Breathing room
Título original: Breathing room
Dirección: John Suits / Gabriel Cowan
Guión: John Suits / Gabriel Cowan
País: Estados Unidos
Año: 2008
Duración: 89 Minutos
Género: Terror / Thriller
Intérpretes: Ailsa Marshall (Catorce, Tonya), Michael McLafferty (Ocho, Lee y Cadáver doce), David Higlen (Cinco, Harry), Brad Culver (Seis), Kim Estes (Diez, Henry), Keith Foster (Anfitrión), Stevens Gaston (Trece), Austin Highsmith (Once), Terri Marsteiner (Tres), Jeff Atik (Uno, Charlie), Eve Sigall (Cuatro, Rothie), Sara Tomko (Nueve), Bryce Gerlach (Dos, Operador), Brandon Stacy (Dos, Nueva habitación)
Producción: Imagination Worldwide, BIG Pictures, New Artists Alliance
Música: Chris Kidd / Kari Rae Seekins / Karl Suits / Tim Ziesmer
Fotografía: John Suits / Gabriel Cowan
Montaje: John Suits
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