Hojas
La nostalgia se desliza por el tiempo y cae lentamente sobre las cosas quietas, esperando las palabras su regreso. La taza va llenándose de un día vacío, y la cuchara es ya un tiovivo apagado. Salgo a la calle, la ciudad se ha convertido en una inmensa libreta.
Despedimos al verano y el otoño que nos invade, y como no, hasta las Justas también ha llegado. En este desafío se puede apreciar que esta estación es muy particular.
Hojas, muestra desde su título una poesía valorable, pero adolece de narrativa. Se queda en una escena otoñal y melancólica dentro de un tapiz en la que no ocurre nada. Me ha chirriado la utilización de la palabra cosas, pues le resta belleza a la estampa.
Naturaleza artificial, juega con lo absurdo, la ciencia ficción y el humor; combinación harta complicada que no se ha sabido resolver. Y esto es así, porque la suspensión de incredulidad se me ha resentido y el autor no ha logrado que la ficción se imponga sin fisuras. Puedo aceptar que exista un otoño sin hojas caídas, que los científicos se preocupen, pero que todo el mundo esté impregnado, de la noche a la mañana, de hojas de plástico, y que para más inri, la resolución del problema venga de un niño; me cuesta entenderlo. Tampoco me ha gustado la construcción del inicio, donde creo que le falta alguna palabra y le sobra el punto. Y para finalizar, el título me sabe a poco.
Mi voto va, sin que ninguno de los dos microrrelatos me haya cautivado, hacia Naturaleza artificial de Radon, porque aprecio un esfuerzo en contar una historia que en su oponente no veo.
Hojas es una prosa poética donde la autora intenta transmitir las sensaciones que vive la narradora cuando llega el otoño. En este relato juega con imágenes que me resultan especialmente potentes como la cuchara y el tiovivo y, sobre todo, la calle convertida en libreta, donde la autora quiere transmitir que la nostalgia del otoño hace que le vuelvan las ganas de escribir a la narradora. El título podía haberse trabajado algo más.
De Naturaleza artificial me gusta la idea de que en un otoño no caiga ni una hoja. Me despierta curiosidad en la primera frase, y eso es algo importante en un micro, la lástima es que luego la explicación no me sorprende, ni me saca una sonrisa. Igual es una valoración muy subjetiva, pero pienso que con esa primer oración se podían haber sacado más cosas.
Mi voto es para Hojas.
Cuando vi Hojas por primera vez pensé: “uf, cursiva.” El caso es que después, al leerlo, encuentro que el uso de la cursiva está más que justificado. Me encanta este micro, y eso que no es que me fascine la poética ni las metáforas. Me gusta mucho el título, esa dualidad entre las hojas de los árboles y las de la libreta. Si tengo que poner un pero sería en la cursiva del título, creo que no es necesario. Bravo, gran micro.
Naturaleza artificial adelanta el final sólo con el título, algo que hay que guardar muy bien, creo yo. Si no fuera por eso, el micro sería muy interesante. Y más interesante sería (para mí) si al final se descubre que no solo los árboles son de plástico, sino también las personas.
Mi voto es para Hojas.
Dos micros harto diferentes. Me cuesta comentarlos.
Me quedo con ninive y su poética otoñal y exijo a Radon mucho más a sabiendas de que él puede hacerlo.
Felicito a ninive por su victoria y agradezco a los jueces sus comentarios. Me gustan mucho las metáforas que utiliza en su texto, aunque eche de menos una historia detrás.
Es cierto que mi texto es difícil y no lo he sabido resolver. Lo escribí apresuradamente sin dejarlo reposar, y eso se nota. Me aplicaré más en el futuro, aunque ahora mismo no esté en mi mejor momento.
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Naturaleza artificial
Aquel otoño no cayó ni una hoja. Científicos de todo el mundo analizaron el problema, pero no encontraron una causa que justificara la situación mundial. Cuando iban a tirar la toalla, un niño dijo: “Oye, pero si son de plástico”.
A las duras, a las maduras y a las jovencitas