Viaje submarino

Reseña del librojuego de R.A. Montgomery ilustrado por Paul Granger

Resulta sorprendente que, con el tema que se traían entre manos, no se lo curraran un poco más con el título. Evidentemente, Viaje submarino (o Viaje bajo el mar, como lo han traducido en otras ocasiones) va de una expedición a las profundidades del océano, pero podrían haber adelantado ya desde la cubierta lo que se descubre en la primera página: que el objetivo es encontrar la mítica Atlántida. Sin duda, un tema mucho más jugoso para los niños amantes de misterios y mundos perdidos que un simple paseo por el fondo del mar.

Además, es un elemento que ocupa buena parte de este título publicado en la colección roja de Elige tu propia aventura. Si bien hay unos primeros compases con calamares gigantes y tiburones (que cazan en manada, por lo visto), la cosa deriva rápidamente a los descubrimientos abracadabrantes y un desarrollo más propio de una ciencia ficción muy ligera (más bien estética) y la temática esotérica atlante.

En sí mismo, nada que reprochar a este enfoque, aunque esté lleno de terribles clichés, ya que a edades tempranas puede resultar todavía novedoso e incluso sugerente. Además, las ilustraciones de Paul Granger acompañan bien, con un equilibrio conseguido entre humor y aventura (con escafandras muy chulas), la trama que nos plantea R.A. Montgomery.

Es esta la que resulta un poco más endeble, no ya tanto por el escenario y cómo se precipita uno dentro de él, sino por lo difícil que resulta tomar decisiones razonadas para sortear los (numerosos) peligros que nos acechan en las profundidades. Qué es mejor, sin más elementos de juicio, ¿alejarse de un pulpo gigante o esconderse? No ayuda, tampoco, que de 117 secciones, nada menos que 42 sean finales. Basta con echar unos cálculos para hacerse una idea de lo rápido (y/o mal) que podía terminar una historia.

Más allá de los problemas de mecánica, Viaje submarino queda como un librojuego curioso y simpático muy de la época. La idea de poder encontrar una civilización entera bajo el mar (llega a coquetear con la teoría de la Tierra Hueca) es de lo más fascinante y, aunque oculta al principio, es lo que nos ofrece este título.