Cuerpos descosidos

Reseña de la novela de Javier Quevedo Puchal publicada por NGC Ficción! en su colección Terror

Para crear una espiral como la que nos encontramos en Cuerpos descosidos no solo hay que tener una mirada aguda para captar los entresijos de la psicología humana, sino también un pulso muy preciso para poder ir dando al lector las dosis justas de información para que el cóctel le embriague pero siempre en su justa medida.

La historia que encierra esta novela empieza de un modo disperso. Vamos conociendo a una serie de personajes atormentados, asolados por sus propios fantasmas personales, en apariencia distantes unos de otros. Transmiten, de entrada, una sensación muy importante para el trasfondo de la novela: soledad. Los protagonistas son, en cierto modo, náufragos en la sociedad moderna.

Luego, a medida que avanza la historia, vamos encontrando nexos, detalles, obsesiones, vínculos, de entre los cuales tal vez el más obvio sea el que deja entrever el título: las cicatrices que marcan los cuerpos descosidos. Es solo la punta del iceberg, solo una media verdad, porque esta novela se sumerge en la sima de lo humano a una profundidad mucho mayor de lo que cabría imaginar.

Al mismo tiempo, a pesar de la dureza de la historia, a pesar del terrible final al que nos vamos conduciendo sin remedio, Cuerpos descosidos no resulta desagradable en ningún momento. No es una obra gore, no es una obra morbosa. Rebosa sensibilidad y delicadeza, pero no de un modo dulzón ni falsamente estético, sino profundo. Como señalaba al principio, da la impresión de que Javier Quevedo Puchal ha indagado en el espíritu humano, y que ha tenido la habilidad para entender varias perspectivas sin necesidad de hacerlas suyas. Y, lo que es todavía más complicado: para plasmarlas de un modo adecuado para que el lector pueda compartirlas.

Cuerpos descosidos es una novela intensa, melancólica, fascinante y triste, pero también destila una humanidad que impacta al lector. Creo que esta es la clave que permite seguir bajando en la espiral sin que todo el tinglado se derrumbe como una tramoya carcomida. Esta, y la prosa rica y precisa del autor, que nos acerca y hace vívidos escenarios y sobre todo personajes de lo más inesperados.

Una novela muy recomendable a pesar de las terribles aguas por las que navega.