Eterno nómada
Allá donde iba provocaba la envidia inmediata. No lo pretendía, le bastaba con ser y estar. Sus enormes virtudes eran su maldición, pues ése sentimiento se transformaba al poco tiempo en peligroso odio e inevitable malquerencia.
Eterno nómada
Allá donde iba provocaba la envidia inmediata. No lo pretendía, le bastaba con ser y estar. Sus enormes virtudes eran su maldición, pues ése sentimiento se transformaba al poco tiempo en peligroso odio e inevitable malquerencia.
MUERTE
En un rincón mis escasas herramientas, melladas y sin filo ya. Yo, toda escombros, toda huesos doloridos, tendida, que no reposando, me espero venir a buscarme.
Captura
Vendrán a por mí y me encontrarán. Sospecho que me atarán de pies y manos, me torturarán e intentarán sacarme lo que sé...Qué ingenuos; para eso tendrán que buscar algo más que mi cuerpo, que mi dolor.
Viuda negra
Caminó sigilosa sobre la desnudez de aquel hombre. Encontró el lugar más vulnerable de su cuerpo y, dejando al descubierto tu feroz propósito, le inyectó el mortífero veneno. Cuando éste sintió el dolor, ya era tarde. Se había enamorado.
La coleccionista
Miró con orgullo su colección de mariposas disecadas. Pronto quedaría completada con el último ejemplar, ese que sentía aletear su enamorado en el estómago cada vez que le miraba.
He inventado algo sobre mí mismo que va más allá de mí mismo. Moebius no está detrás, sigue una existencia paralela a la mía.
Diva de por vida
Aunque hace años que había desaparecido de la escena pública, sentía que aún la miraban al pasar: algunos con cariño, otros con admiración, todos con nostalgia y, también existían los que la envidiaban. Y era a estos últimos a los que labrada su perro lazarillo.
Yo, yo, yo... lo sé. ¿Es el huevo, Doña Margarita?
El intruso
Lucía se incorpora en el colchón. Está sola en esa casa enorme. Llama a Anko, su lazarillo. Descuelga la mano por el borde del colchón cuando oye al perro aproximarse. Siente la lengua lamiendo su mano, y empieza a calmarse.
Mientras tanto, Anko yace en el jardín, degollado.
Siempre es agradable conocer caras nuevas
El intruso
Lucía se incorpora en el colchón. Está sola en esa casa enorme. Llama a Anko, su lazarillo. Descuelga la mano por el borde del colchón cuando oye al perro aproximarse. Siente la lengua lamiendo su mano, y empieza a calmarse.
Mientras tanto, Anko yace en el jardín, degollado.
Qué barbarité. Cómo se me ha quedado el cuerpo...
Palabra: degollado.
Nací libre y moriré libre.
El gracioso
Creyó que sería divertido. Cogió la cuerda que había encontrado y la tensó entre dos árboles que flanqueaban la carretera. La trampa decapitó al primer motorista que pasaba por allí. El chico, horrorizado, huyó hacia su casa. En la puerta sus padres aguardaban expectantes: su hermano estrenaba moto.
Esto no es Vietnam, en los bolos hay reglas.
...
Yo te consigo un dedo antes de las tres. Con esmalte de uñas. Ja. Putos aficionados… nos mandan un dedo y por eso nos tenemos que cagar de miedo. Dios Santo.
EL RETO
Toca el claxon y me insulta, sacando la cabeza por la ventanilla. Le dedico una peineta. Sale del coche y viene hacia mí. Bajo de la moto, me quito el casco y saco pecho. Me rompe la cara.
Nueva vida
No le había salido barata, no, pero bien valía la pena: nadie la reconocería. Y además, si lo que decían del reflejo del alma era verdad, ni siquiera se la podía culpar por habérsela arrancado a esa chiquilla. No, al menos, con la cara que llevaba ahora.
Bienvenidos al Circo Dragosi
Excursión
Ahora que vamos despacio (bis), vamos a contar mentiras tralará (bis). Doña María ve muy bien, el Director está de una pieza, el viaje es agradable, el conductor anda sereno, el autobús puede volar y nosotros estamos vivosss, tralará.
Yo, yo, yo... lo sé. ¿Es el huevo, Doña Margarita?
¡Qué igualité! ¡Qué macabrité hay aquí!
Se recomienda temas mas alegres, más prima... vez... suales...
Y encima jooo... que la palabra es: tralará.
Nací libre y moriré libre.
Diálogo entre genios
-Tralará, tralará, tralarí, tralará.
-¿En serio?
-Como lo oyes.
Frustración
Haces como que no oyes, ni siquiera me miras. Sigo fregando los platos con rabia, el ruido del grifo ahoga mis sollozos. La idea se materializa cuando me concentro en lo que tengo entre las manos: el estropajo frotando el cuchillo jamonero.
Las secuelas
Cuando el niño repara en la librería pregunta
- Mamá, ¿Eso que es?
- Un sujetalibros, hijo mío - contesta la madre- Antes se usaba para poder cortar bien la pata de jamón.
El niño se queda pensativo
- ¿Y qué es un jamón?
Inversión segura
Hoy me ha llegado el pedido de jamones. Esta vez no se me escapan las microjustas.
Siempre es agradable conocer caras nuevas
Juego sucio
Cuando el escritor de las mil caras creyó encontar su inspiración, aparecio un rival alado que se llevó volando a su musa.
Traición
La musa al final se dejó seducir. Por otro. Ahora caminaba de la mano de un escultor.
Quiero ser canalla y vividor. Aún más.
IMPERFECCIÓN
El artista no terminaba de lograr que la pieza que esculpía en mármol reprodujera fielmente la excepcional belleza de la modelo. De ahí que, haciendo de tripas corazón, decidiera quitarle la vida para luego recubrirla con una pátina de escayola.
Error de método
Le juro, agente, que no pretendía ahogarla. Solo estaba intentando hacer un molde de su rostro, mientras aún dormía, antes de que saliera despavorida, como me hacen todas al despertar. ¡No sabe la de máscaras que se me han quedado a medias!
Bienvenidos al Circo Dragosi
Rueda de reconocimiento
—Señor Martínez, ¿podría reconocer al sospechoso?
—Sin media es difícil.
—Comprensible. Agente, que se las pongan.
***
—¿Y bien?
—El número cinco.
—¿El cinco? Imposible, está de relleno y es policía.
—¡Pues estoy seguro y además es el mismo que le rompió el corazón a mi hija!
Yo, yo, yo... lo sé. ¿Es el huevo, Doña Margarita?
Rueda de reconocimiento
—Señor Martínez, ¿podría reconocer al sospechoso?
—Sin media es difícil.
—Comprensible. Agente, que se las pongan.
***
—¿Y bien?
—El número cinco.
—¿El cinco? Imposible, está de relleno y es policía.
—¡Pues estoy seguro y además es el mismo que le rompió el corazón a mi hija!
Bueniiismo chavalote. Yo le boto tres puntos pa los dardos.
La palabra es Ija
Quiero ser canalla y vividor. Aún más.
Rueda de reconocimiento
—Señor Martínez, ¿podría reconocer al sospechoso?
—Sin media es difícil.
—Comprensible. Agente, que se las pongan.
***
—¿Y bien?
—El número cinco.
—¿El cinco? Imposible, está de relleno y es policía.
—¡Pues estoy seguro y además es el mismo que le rompió el corazón a mi hija!
Bueniiismo chavalote. Yo le boto tres puntos pa los dardos.
La palabra es Ija
Gracias, Señor Barlon.
Al final estas clases avanzadas que se dan aquí me están sirviendo de algo. Usted va por buen camino, aunque a veces se coma las H.
La palabra es Hija
Yo, yo, yo... lo sé. ¿Es el huevo, Doña Margarita?
Acto de amor
La quiero como a mi vida; por eso la abrazaré bien cuando abra el gas.
A la carta
Gaspar entra a la pequeña tienda. Como es habitual, nadie le ve. En los estantes, meticulosamente ordenados y etiquetados, botes de gas pimienta, gas butano, gas mostaza, gas natural, gas radón…
Para desaparecer por completo, como parece desear el mundo, pedirá un combinado explosivo que deje huella.
Cuando despertó, la huella aún estaba ahí.
Bienvenidos al Circo Dragosi
EL COLAPSO
El viejo ha llegado a la playa temprano, ha desplegado la toalla y se tendido sobre ella boca abajo. Doce horas después, anochece y ahí sigue en idéntica posición con la espalda colorada, cuando ya todo el mundo se ha marchado.
¿Dónde están?
El sol, tus ojos, las nubes, tus manos, los edificios, tus labios, los coches, tu cuello, las montañas, tu lengua, los trajes, tu risa, los anuncios, tu espalda, las obras, tu acento, la noche, tu ombligo, los restaurantes, tus gemidos, mi talento para los microrrelatos.
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SUMARÍSIMOS
En aquel remoto país, emisarios del rey visitaban regularmente las viviendas de sus habitantes, se llevaban por la fuerza a los jóvenes con talento y les daban muerte inmediata.