Terror en píldoras

David G. Panadero nos habla en este libro de Las películas episódicas de terror

A priori podría parecer que este Terror en píldoras: Las películas episódicas de terror es un libro muy especializado, solo para conaisseurs, pero nada más lejos de la realidad. Es, más bien al contrario, un modo perfecto de introducirse en el fascinante mundo de la narración breve cinematográfica en su vertiente de terror. No dudo que para los que ya estén metidos en el tema resulte una lectura entretenida y que en las referencias que incluye disfruten de recuerdos y guiños. Sin embargo, como lego en la materia, creo interesante resaltar que no es necesario este conocimiento previo para disfrutar del libro.

Esto se debe, por un lado, a lo apasionante del tema. Estamos acostumbrados a un cine que no hace demasiados experimentos con el formato (en parte, deduzco, por las imposiciones del mercado y la distribución; en parte, no lo pongo en duda, por las propias preferencias de los espectadores), y resulta apasionante ver otras vías, más minoritarias o desconocidas, como las de estas narraciones episódicas. Adentrarse en este mundo de los corto o mediometrajes presentados por un maestro de ceremonias / hilo conductor abre las perspectivas y sorprende encontrar nombres famosos, recuerdos sepultados de infancia, etc.

Por otro lado, su accesibilidad se la debemos también al autor: David G. Panadero. Su estilo es simpático, ameno y asequible. No se pierde en su propio conocimiento, sino que lo presenta de un modo amable y ligero a cualquier lector curioso. El libro presenta un buen equilibrio entre anécdotas, opinión y exposición de hechos tangibles, de modo que resulta una lectura absorbente.

Personalmente, disfruté mucho con los antecedentes literarios (la cabra, que tira al monte, ya se sabe) y las reflexiones en torno a este tipo de narraciones. Luego, ya metido en harina, tuve la oportunidad de fichar unas cuantas películas que no pienso perderme y de, al mismo tiempo, constatar que las reflexiones del autor sobre obras que me eran desconocidas eran igualmente enriquecedoras.

Como aspecto mejorable sí que señalaría que se echa en falta algo más de material visual (más carteles, algún fotograma para ilustrar las películas), aunque soy consciente de la dificultad que debe entrañar incluir este material en una edición tan modesta (es un librito que apenas cuesta 5 euros) y de lo fácil que resulta buscarlo después (o al mismo tiempo) a través de Internet.